Archivo mensual: julio 2014

Lo que no entiendo de la planificación deportiva de este año

En general, creo que se está trabajando bien desde la Secretaría Técnica con el fin de lograr una plantilla más competitiva que la de la temporada pasada, pero hay algunas cosas, concretamente tres, que no me cuadran, aunque estoy seguro de que tendrán su explicación, más o menos lógica:

1.- El fichaje de un portero como Mariano Barbosa. Desde mi punto de vista, el puesto de guardameta es uno de los más importantes del equipo, sino el que más. Por tanto, a mí me hubiera gustado que se hubiera traído un jugador que mejorara a Beto. El portugués da una de cal y otra de arena, y eso no se lo puede permitir un equipo que aspire a lo máximo. Y me da la impresión de que, con el fichaje de Barbosa, se ha buscado más un suplente que un titular. Tiene además, 30 años. Es decir, no es una promesa ni un jugador de futuro. Después, el tiempo dará y quitará razones, pero, a priori, no parece que Barbosa vaya a estar capacitado para quitar la titularidad a Beto. También me extraña mucho el hecho de que sólo haya firmado por dos años. Parece como si no hubiera confianza desde el club en él.

2.- El fichaje de Alejandro Arribas. Pienso lo mismo que en el caso de Barbosa. Si se trae un central, que sea para mejorar lo que hay. También me parece improbable que desbanque a Pareja, Fazio o Carriço. Dado que ya fue objeto de deseo de Monchi la pasada temporada, parecía cantado su fichaje cuando se conoció que había rescindido su contrato con Osasuna. Lo que me extraña sobremanera es que, teniendo sólo 25 años, sólo haya firmado, al igual que Barbosa, por dos temporadas.

3.- Y por último, que a estas alturas, a 14 días de la disputa de la Supercopa de Europa, aún no se haya traído al centrocampista ofensivo que tanta falta nos hace. Entiendo que haya que ir con cuidado, que no se pueda fallar, pero el tiempo se echa encima y una posición clave del equipo sigue sin estar cubierta, estando a las puertas de la disputa de un título europeo.

Aparecen muchos nombres en prensa –seguramente, la mayoría inventados–, pero lo que me llama poderosamente la atención es que, cuando se tratan cantidades de siete u ocho millones de euros, se hable de que está fuera del alcance del Sevilla. ¿Para qué queremos el dinero entonces? Si de verdad hay interés por un jugador, y la certeza absoluta de que puede convertirse en una gran estrella, no veo por qué no se puede invertir ocho o diez millones de euros, si eso supone un salto de calidad en el equipo.

Y no es que falte el dinero precisamente. Ya la temporada pasada hubo superávit, y ahora con la venta de Rakitic, más el dinero extra que se ha ganado por lograr la Europa League, bastante por encima de lo presupuestado en un principio… No es para tirar la casa por la ventana, pero tampoco para poner en riesgo operaciones que interesen por regatear un par de millones de euros.

En fin, esperemos que tanto Barbosa como Arribas y el centrocampista ofensivo que está por llegar triunfen plenamente, y a ser posible, que sea a partir del 12 de agosto.

Eintrach 1 – Sevilla FC 2. Muchísimo que mejorar

Mal partido el que ha hecho el Sevilla FC esta tarde, ante un Segunda División alemán. Quedó claro que queda muchísimo por mejorar, en todas las líneas, pero sobre todo en la creación de juego, porque, de nuevo, hemos demostrado que nos cuesta un mundo hacer ocasiones de gol.

Tampoco hay que dramatizar, pues sólo se trata de un partido de pretemporada, que al fin y al cabo debe servir para coger la forma física y ensamblar las piezas.

Como en el anterior partido, poco hay que destacar. Juan Muñoz volvió a demostrar que lleva el gol en la sangre. Habrá que ver qué temporada hace en el filial, porque es evidente que con Bacca, Gameiro y Aspas, no tendrá sitio en la primera plantilla. Además, aunque muestre buenas maneras, aún le queda muchísimo por aprender.

En el partido de hoy el Sevilla no ha estado nada seguro atrás. El Eintrach, a pesar de ser un equipo muy normalito, nos ha creado bastantes ocasiones de gol.

Se retiró lesionado Beto. Esperemos que no tenga nada importante.

Ahora, a descansar las piernas para volver el Domingo a la carga. Y en las oficinas, más vale que se acelere el fichaje del centrocampista creador. Nos vendrá de lujo.

 

Lyon 0 – Sevilla FC 0. Poco que resaltar del primer partido serio de pretemporada

Había expectación para ver cómo se desenvolvería el Sevilla en el primer partido de pretemporada ante un rival de cierta importancia, como es el Olympique Lyonnais, y, cómo no, para ver la actuación de las nuevas caras de este Sevilla 2014-2015. Pero el partido resultó ser un verdadero tostonazo: con muy pocas ocasiones de gol, con muchas imprecisiones en el pase y con muy poco ritmo, ya que a la falta de fondo físico de los jugadores, se le unía las constantes interrupciones que provocaban los numerosos cambios que hicieron los dos equipos.

Poco que resaltar del partido de ayer. Si acaso, me quedo con la actuación de Juan Muñoz, el prometedor delantero utrerano, Carlos Fernández, y con el buen trabajo defensivo. Tampoco es que el OL hiciera mucho por perforar nuestra portería, pero cuando el balón rondó el área, la defensa se mostró contundente. Sergio Rico atajó lo poco que le llegó, pero se mostró inseguro y nervioso en alguna que otra ocasión, y tuvo un par de fallos que podrían haber costado el partido.

Resultó evidente que el Olympique Lyonnais estaba mucho más rodado que el Sevilla, pues tenían una marcha más de velocidad y combinaban mejor. El Sevilla aún tiene que mejorar muchísimo en forma física y en el juego combinativo, pero eso se ganará únicamente con el paso del tiempo. Por cierto, un tiempo que se nos echa encima. La Supercopa de Europa está a 19 días vista y el centrocampista ofensivo sigue sin llegar. Supongo que estará al caer, porque un título europeo no es baladí.

No hubo lesionados, y yo con eso me conformo en pretemporada. Lo importante son los partidos oficiales, que no tienen absolutamente nada que ver con los amistosos, tanto para lo bueno como para lo malo.

Tony Chapron, el árbitro del partido, estuvo más tranquilito que en el Friburgo-Sevilla, de la pasada Europa League. No habría estado mal que hubiera animado un poco el partido.

A seguir preparándose, porque ayer quedó claro que aún queda muchísimo camino para llegar en buen estado de forma al 12 de agosto.

POR UN MUSEO DIGNO DEL SEVILLA FC

#Somosloquehemossido

Falta menos de un mes para luchar por una copa que traer a las vitrinas de nuestro Sevilla F. C.

Todos estamos deseando poder tenerla con nosotros.

¿Y luego qué?

Al día siguiente deja de ser noticia y se convierte en Historia.

Pasaría a ser, como la que vino de Turín, una pieza más de la que estar orgullosos, pero como esa tenemos otras de las que también sentirnos orgullosos.

La Historia sevillista es grande y rica.

En los tiempos de la calle Harinas los trofeos se mostraban en la Secretaría del club, hoy los tenemos en la sala de trofeos o en el pasillo del antepalco.

El sevillismo necesita algo más, algo como lo que tienen la mayoría de los clubes de su entorno: un museo.

Un museo moderno, no una simple superposición de trofeos, como si de un mueble bar se tratase.

Un espacio interactivo, dinámico, atrayente para que el sevillista se encuentre consigo mismo.

Un lugar en el que tengan cabida, además de sus trofeos, aquel balón con el que se ganó una copa hace ochenta años, o la camiseta de la selección que lució tal jugador, hace más de cincuenta años, o tantos y tantos objetos que merecen ser recordados.

Un santuario sevillista donde tenga un lugar de honor aquel periódico en el que se narra en inglés el nacimiento y la constitución del Sevilla Fútbol Club en 1890, cuyo anuncio oficial no debe esperar más.

Todos los que han estado antes que nosotros se merecen que los recordemos dignamente, al igual que lo que están hoy querrán que algún día den valor a lo conseguido.

Por más que queramos mirar al futuro, nunca podemos perder de vista que

#SomosEquipo
#Somosloquehemossido

La explicación de la baja cláusula de Barbosa

Parece ser, según confirma el Presidente de Las Palmas, que Barbosa será jugador del Sevilla FC, aunque aún no se haya hecho oficial.

El Sevilla se haría con él pagando la cláusula de rescisión, que asciende a 150.000 euros. Dado el rendimiento que ha dado en los dos últimos años en la UD. Las Palmas, muchos no se explican su ridícula cláusula de rescisión, pero quizás en este enlace se explique.

Por otro lado, Roberto Arrocha acaba de confirmar en ABC que, según el Presidente de Las Palmas, le pusieron esa cláusula tan baja porque «nos veíamos obligados moralmente a hacerlo por todo lo que nos había dado».

Es decir, llegaron a un acuerdo para la renovación, pero con una cláusula de rescisión baja, por si un equipo de superior categoría mostraba interés en el guardameta.

Particularmente, si es cierto el fichaje de Barbosa, no me gusta. Tengo que aclarar que no he visto jugar a Barbosa. Sólo recuerdo de él que no pudo atajar el gol decisivo que llevó al Córdoba a Primera División, y curiosamente me pareció un error garrafal de Barbosa, puesto que el remate del jugador cordobés fue bastante deficiente. Dejando aparte lo que pudo ser un simple error puntual, lo que no me gusta en absoluto es la idea con la que el Sevilla ficha a Barbosa: para ser suplente de Beto. O al menos, eso es lo que dicen los medios de comunicación. En mi opinión, si se ficha un portero, debería ser con la idea de que fuera titular, puesto que  Beto, aunque haya tenido algunas actuaciones meritorias, no deja de ser un portero «normalito». En cualquier caso, el portugués es bastante irregular en su rendimiento, y eso es correr riesgos es una posición que da o quita muchos puntos a lo largo de un campeonato.

Quizás hubiera sido más acertado traer a un portero más contrastado, y si la idea era buscar un suplente para Beto, haber buscado a un jugador joven y con proyección (Barbosa cumplirá 30 años el día 27 de este mes).

En cualquier caso, si Barbosa forma parte del Sevilla 2014-2015, bienvenido y mucha suerte.

Derechos de TV: Real Madrid y Barcelona pretenden seguir robando

El Real Madrid ha sacado a concurso su nuevo contrato televisivo y rechaza, como es lógico y era de esperar, el reparto centralizado de los derechos de televisión.

Entiendo perfectamente la postura de Madrid y Barcelona, puesto que no quieren perder sus privilegios económicos. Es normal que quieran seguir cobrando 140 millones de euros sólo en concepto de derechos de televisión. También es normal que únicamente tengan en cuenta sus propios intereses y quieran hacerlo a costa de los demás equipos, los cuáles, en el peor de los casos, tienen que hacer encajes de bolillos para poder subsistir, y, en el mejor de los casos, vender a sus mejores jugadores para cuadrar presupuestos.

Es normal que a los dos pudientes les dé lo mismo que tal o cual equipo desaparezca o pierda la categoría. Lo que no veo normal, en absoluto, es que los 18 equipos restantes no se planten en serio y amenacen con no jugar la liga hasta que haya un reparto de derechos televisivos justo. Es evidente que Madrid y Barcelona deben cobrar más que el resto, pero no tantísimo.

No me cabe en la cabeza que los Presidentes de esos 18 equipos no reclamen lo que es suyo. Si lo hicieran, y siempre que supieran gestionar los nuevos ingresos, podrían aspirar a grandes logros. Posiblemente, cualquier equipo de mitad de la tabla, con un poco de ambición y acierto, podría ponerse como objetivo entrar en Europa. Tal y como están las cosas actualmente, eso es imposible. Sólo pueden aspirar  a mantener la categoría y a tener la menor pérdida económica posible… hasta que bajen  a Segunda.

Mientras tanto, esos Presidentes contemplan, atónitos y timoratos, cómo Madrid y Barcelona se gastan todos los años 70,  80  o más de 90 millones de euros en sólo un jugador. Y lo peor es que parece que les da igual, puesto que no son capaces de mover un solo dedo para cambiar la situación establecida. ¿No se dan cuenta de que gran parte de ese dinero que se llevan por la cara Madrid y Barcelona, les corresponde?

De no cambiarse la situación, seguiremos estando condenados a la ya conocida Liga de mierda, donde Madrid o Barcelona pelean por superar los 100 puntos, mientras diez equipos pelean por mantener la categoría y sólo unos cuantos por las restantes plazas europeas. Esta temporada pasada ha habido una excepción, pero considero que ha sido totalmente casual. El Atlético ha ganado la liga porque se han empeñado en meter a un tercero en discordia, a base de favores arbitrales, y, sobre todo, porque tanto el Madrid como el Barcelona se han desinflado en las últimas jornadas, haciendo un final de liga verdaderamente lamentable. Obviamente, el Atlético tiene un gran equipo, pero no lo suficiente como para ganar la liga. Sólo un cúmulo de circunstancias, que será complicado que vuelvan a darse,  lo ha hecho posible.

Si queremos tener una liga de primer nivel, al estilo de la Premier inglesa, donde cada partido es un espectáculo, sólo hay una opción: que los 18 equipos restantes, o una gran mayoría de ellos, se planten y amenacen con no empezar la competición hasta que haya un reparto de los derechos televisivos justo.  Está más que demostrado que contra los dos grandes –grandes ladrones, diría yo–las buenas maneras no sirven. Sólo una posición de fuerza y contundencia los puede «convencer» de que la máxima competición nacional no puede seguir siendo una pantomima.

¿Hasta cuándo vamos a seguir así? Porque el cambiar la situación, aunque pueda parecer lo contrario, no depende de los dos equipos más laureados de la liga, sino de los otros 18 restantes.

www.losotros18.com

Perotti, una buena venta

Habrá que agradecerle al Génova el que se haya llevado a Diego Perotti, un jugador que no podía estar más devaluado, tras su bajo rendimiento deportivo y su eterno problema con las lesiones.

El Perotti de ahora no se parece en nada al que maravilló a todos cuando llegó a la primera plantilla procedente del Sevilla Atlético. Aquel Perotti era rápido, desbordaba con una facilidad tremenda y parecía que estaba llamado a convertirse en una gran estrella que duraría poco en el Sevilla. Fue un jugador de los más importantes, adueñándose de la banda izquierda y siendo el autor de un gol que nos llevó a clasificarnos para la Champions. E incluso fue convocado y debutó con la Selección Argentina, de la mano de Maradona.

Pero empezó su estancamiento, que se hizo más patente por las continuas lesiones musculares que sufría. Y de ser imprescindible y decisivo, pasó a ser un lastre. Para colmo, tuvo un enfrentamiento con la afición y no fue lo suficientemente inteligente como para pedir perdón. Perotti caía en picado en todos los sentidos: deportivo, físico, anímico y en valor económico.

En su cesión a Boca Juniors, ya en el declive total, no hizo absolutamente nada positivo. Apenas jugó, de nuevo por las lesiones. A pesar de eso, el Génova se interesó por él y supongo que en la Secretaría Técnica del Sevilla verían el cielo abierto. Era una oportunidad única para quitarse una ficha importante de encima, de un jugador que estaba además en su último año de contrato y totalmente devaluado. Por eso me parece una buena venta la de Perotti, aunque haya sido por una cantidad más bien ridícula, si tenemos en cuenta lo que llegó a valer el jugador.

Se dice que la Juventus llegó a ofrecer 14 millones de euros por Perotti. De haber sido cierto, ésa sí que habría sido una venta excepcional, porque, en mi opinión, Perotti nunca llegó a valer esa cantidad.