Como se esperaba, victoria fácil ante el Dinamo de Zagreb, por un contundente 4-0. No podía ser de otra forma, dada la debilidad el rival. Ya me dio la impresión, cuando vi el Dinamo-Sevilla, que los croatas no tendrían nivel para jugar en la Primera División Española. Creo que ayer quedó confirmado, ya que Sergio Rico fue un espectador más.
Los tres puntos no dan la clasificación para octavos porque el Olympique de Lyon dio la sorpresa al empatar en el Juventus Stadium, en la recta final del partido. Sin duda, la importante baja de Dybala habrá tenido bastante que ver, ya que es un jugador que marca diferencias. Ojalá que el argentino no esté recuperado para el día 22. La clasificación del grupo ha quedado así:
1.- Sevilla FC, 10 pts.
2.- Juventus, 8 pts.
3.- Olympique Lyon, 4 pts.
4..- Dinamo Zagreb, 0 pts.
Curiosamente, a pesar de lo que pueda parecer, el equipo que tiene más fácil y yo diría que asegurada al 100% es la Juventus, ya que el OL no puede llegar nunca a los 11 puntos, y a los italianos, aunque pierdan en el Ramón Sánchez Pizjuán, les bastaría con ganar a los croatas, que ya están eliminados matemáticamente, en el Juventus Stadium.
El equipo que tiene más complicada la clasificación es el Olympique de Lyon, ya que tendrían que ganar en Croacia –lo cual es fácil– pero un simple empate del Sevilla les dejaría sin ninguna opción. En el caso de que el Sevilla perdiera, habría que disputar un partido «a vida o muerte» en Lyon. Esperemos que no se dé este caso, pero si se da, creo que el Sevilla puede puntuar allí, aunque no sería nada fácil, pues el Lyon, como ya tuvimos la oportunidad de comprobar, es un equipo bastante fuerte. Arriba tiene jugadores rapidísimos y de mucha calidad, como Lacazette, Fekir o Tolisso, que podrían jugar en cualquier equipo del mundo.
En cuanto al partido, fue dominado, de principio a fin, por el Sevilla, y quedó sentenciado a raíz de la absurda expulsión de Stojanovic, que hizo una fuerte entrada a Vitolo, más que evitable, en el centro del campo, y, además, justo delante de las narices del árbitro, el alemán Felix Zwaye. Quedaba toda la segunda parte por delante y el Dinamo ya perdía 1-0, con gol de Vietto, quien, a la media hora de juego, batió a Livakovic de un fuerte disparo raso, a pesar de que no tenía mucho ángulo.
En la segunda parte, el Sevilla siguió percutiendo sobre el área croata, hasta que los goles fueron cayendo con relativa facilidad. El segundo llegó tras una extraordinaria pared entre Vitolo y Escudero, que definió perfectamente –otro gran partido de nuestro lateral–. El tercero llegó en un córner, rematado por N’Zonzi, y el cuarto fue otra de Ben Yedder, a pase de Mariano.
Prácticamente, todo el equipo jugó a un gran nivel. Los defensas estuvieron perfectos, Mercado y Rami no dieron ninguna opción a sus rivales y Escudero y Mariano, además de cumplir en defensa, subieron la banda en multitud de ocasiones.
En la zona media, el Sevilla fue el dueño y señor. N’Zonzi volvió a hacer un partidazo, como ya es habitual. Además, marcó un gol. Como encima marque goles, con la cláusula tan ridícula que tiene, nos va a durar diez minutos. Entre él y Kranevitter, cortaban todo lo poquito que intentaba el Dinamo.
También me gustó el partido de Ganso, que fue todo un espectáculo. Es impresionante con la facilidad que ve el último pase y a los compañeros desmarcados. Lo vi mejor físicamente, aunque se retiró con molestias, que, según parece, se trataba de unos simples calambres.
En mi opinión, el partido era ideal para haber dado descanso a algunos jugadores que lo están jugando todo, como Mariano o Vitolo, aunque también es cierto que la goleada nos puede venir bien para una hipotética clasificación ajustada.
Lo bueno es que esta gran victoria no puede apenas disfrutarse, porque ya asoma el todopoderoso Barcelona. Que viene sin Iniesta y sin Piqué, pero sí serán de la partida Messi, Suárez y Neymar. Vaya tres.