El próximo sábado el Sevilla tiene un partido importante en Málaga, ese rincón de Andalucía donde tanto se nos quiere y aprecia. Es, por tanto, un partido al que hay que ir a ganar, puesto que nos puede dar acceso a la cuarta plaza. Es nuestro objetivo desde el inicio de temporada, por mucho que desde la entidad, para quitar presión, se diga que el objetivo es clasificarse para Europa.
El problema es que sólo cuatro días después tenemos un partido muchísimo más importante, ya que, de vencer, nos daría un nuevo título europeo, el cual conlleva mucho prestigio y dinero. Y además, por si fuera poco, también nos daría el acceso directo a la fase de grupos de la Champions League. Es evidente que, comparado con la posible obtención de nuestra cuarta Europa League –que se dice pronto–, la cuarta plaza se antoja un premio menor, pues sólo daría acceso a la eliminatoria previa a la fase de grupos.
Tampoco se debe olvidar que la cuarta plaza no depende de nosotros. Ya podemos ganar 0-7 en Málaga, que si el Valencia se lleva los tres puntos en Almería –algo bastante probable–, no servirá para nada. El Sevilla está haciendo una grandísima temporada, pero ha dejado escapar puntos importantísimos que ahora se echan mucho de menos. Claro que eso también le pasa a todos los equipos. Así a vuelapluma, recuerdo el Sevilla-Valencia , donde nos empataron en el descuento, el Sevilla-Eibar (0-0), Sevilla-Levante (1-1, tras fallo garrafal de Beto) o Real Sociedad-Sevilla (4-3), partido este último que nunca se habría perdido de haber presentado una defensa medio decente.
Entonces, teniendo en cuenta esto, ¿qué debería hacer el Sevilla en Málaga? ¿Presentar a los titulares o a los suplentes? ¿O quizás una mezcla, un término medio? Yo lo tengo clarísimo: hay que ir a Málaga a ganar, pero con los suplentes. Lo que nos jugamos cuatro días después es demasiado grande como para arriesgar a jugadores importantes que no tienen sustitución posible. Hay que recordar que el Málaga considera los partidos contra el Sevilla como derbis y, por tanto, el partido será a cara de perro. Si será importante para el Málaga, que incluso va a ir el jeque, que hace tiempo que no pasea su turbante por allí.
En fin, no quiero ni pensar que tengamos que jugar en Varsovia con una defensa de circunstancias, que es nuestra línea más castigada. El Dnipro no es ninguna perita en dulce y alinear a nuestros mejores jugadores en Málaga sería casi una irresponsabilidad.
Yo me decantaría por una alineación como esta: Beto; Coke, Arribas, Fernando Navarro, Diogo; Reyes, Iborra, Luismi, Deulofeu, Denis Suárez; Aspas. Pienso que es un once que puede ganar en Málaga perfectamente, siempre que la defensa no cometa muchos errores, y que no pondría en peligro la participación de ningún jugador para la Final de Varsovia.