Tras la derrota in extremis del Atlético de Madrid ayer, en su propio estadio, ante el Villarreal, la lucha por la tercera plaza –esperemos que no por la cuarta– se pone al rojo vivo. El Villarreal fue capaz de ganar en el Calderón porque creyó en la victoria desde el primer momento. La prueba fue la actitud de los jugadores amarillos durante todo el partido y, por supuesto, la de su entrenador, que alineó a dos delanteros. Esto dista bastante de lo que hizo hace unas semanas el Sevilla de Sampaoli, que, prácticamente, salió derrotado desde vestuarios.
También es cierto que el Villarreal llega lanzado porque le está acompañando bastante la suerte. Ayer pudo perder claramente y hace unos días ganó con un gol postrero, marcado con la mano.
Mañana, ante el Celta de Vigo, nos jugamos, nada más y nada menos, que el mirar exclusivamente a la tercera plaza o seguir mirando hacia abajo. La victoria del Villarreal nos vendrá de perlas si somos capaces de vencer mañana. Sin embargo, será un duro revés si mordemos el polvo ante los vigueses, que, al igual que un empate, nos obligaría a seguir mirando en las dos direcciones.
Al Celta no lo vamos a descubrir ahora. Además de un excelente entrenador –Berizzo, que junto con Valverde es el entrenador que más me gusta para sustituir a Sampaoli–, está plagado de buenos jugadores, muchos de ellos internacionales, como son Pablo Hernández, Guidetti, Sisto, Wass o Iago Aspas, quien es, sin duda, el jugador más determinante del Celta. Lamentablemente, Emery no supo apreciar sus cualidades y ahora lo están disfrutando en Vigo.
Pero el Celta no se queda sólo en esos jugadores internacionales. También habrá que vigilar de cerca a otros como Bongonda –que es muy rápido–, Beauvue, las subidas de Hugo Mallo, o a nuestro canterano Jozabed, que suele ver puerta con facilidad.
Para superar al Celta tendremos que hacer un gran partido, como ya hicimos en la primera vuelta, donde Iborra marcó tres goles. Me gustaría que Sampaoli le diera una segunda oportunidad a Ganso, que se la merece después del gran partido que hizo ante el Granada, pero que pusiera por delante de él a Ben Yedder, que sigue siendo nuestro mejor goleador, a pesar de los poquísimos minutos que está jugando. Por las bandas, me decanto por Jovetic y Sarabia, que tienen más calidad y más gol que Correa, a pesar de que el argentino está en un buen momento de juego. A quien no quiero ver, ni en pintura, es a Nasri. Lleva varios meses a un nivel ínfimo, y no creo que vaya a cambiar en estos cinco partidos que quedan.
El Ramón Sánchez Pizjuán, dada la importancia del partido, debería estar abarrotado, pero mucho me temo que la amenaza de lluvia, y al jugarse en día laboral, retraerá a mucha gente.
La lista de convocados del Celta la forman: Sergio, Iván Villar, Hugo Mallo, Fontàs, Pape Diop, Radoja, Bongonda, Pablo Hernández, John Guidetti, Iago Aspas, Pione Sisto, Beauvue, Jozabed, Daniel Wass, Jonny, Sergi Gómez, Cabral y Roncaglia.
Son bajas por lesión Rubén, Rossi y Planas, y, por sanción, Marcelo Díaz –un problema menos– . Se quedan en Vigo, Lemos, Hjulsager y Señé.
El árbitro del partido será Gil Manzano. Esperemos se comporte.