Todo el mundo coincide en que la primera vuelta del Sevilla ha sido para olvidar. Bueno, menos el Presidente, que, curiosamente, le da un notable. Pero dejando a un lado, alguna excepción, está claro que ser séptimos en la tabla, a diez puntos del cuarto, una vez finalizada la primera vuelta, no entraba dentro de las previsiones. Sin olvidar, por supuesto, los partidos tan lamentables que hemos hecho fuera de nuestro estadio.
Sin embargo, soy optimista para la segunda vuelta. Y lo soy, si tenemos en cuenta que ya se podrá contar en defensa con Rami y Carriço, y que se fichará un central –que espero que no sea Fazio–. Además, parece ser que Emery ya se ha dado cuenta de que el mejor centro del campo posible es el formado por Krychowiak-Cristóforo-Banega.
Por tanto, creo que, con la incorporación de esos dos nuevos jugadores, la fortaleza defensiva del equipo va a aumentar considerablemente, de manera que ya no concederemos puntos tan fácilmente. En ocasiones, hemos perdido partidos con regalos nuestros, donde el rival apenas ha llegado un par de veces a nuestro área. Les ha bastado, simplemente, con aprovecharse de nuestra frágil defensa y de un centro del campo que no funcionaba, ni en la creación ni en la destrucción.
Todo eso, puede haber llegado a su fin. Si a Emery no le da por cambiar lo que funciona. Porque esa es una de las cosas que no entiendo de nuestro entrenador: parece que da con un once ideal, y, de buenas a primeras, hace cambios importantes sin venir a cuento.
De ser ciertos las noticias que llegan de Italia, que sitúan a Immobile de vuelta en el Torino, ya sería perfecto que se encontrara un sustituto que apretara las clavijas a Gameiro.
Por cierto, cuando digo que soy optimista, me refiero a que entraremos en Europa. Hemos llegado a estar tan mal, que he visto en peligro los puestos europeos. Ahora parecen relativamente fáciles, porque estamos a dos puntos de la quinta plaza. La Champions, vía liga, no la descarto, pero está muy complicada. No ya porque el Sevilla tenga que recortar diez puntos, sino porque el Villarreal está muy fuerte, tiene una buena plantilla y, además, le sale todo.
Para entrar en Champions, hay que empezar bien desde el inicio y no cometer los graves errores de planificación –centrales y delanteros, principalmente– que se han tenido esta temporada.
EL BÉTICO EN EL 2004 QUEDO CUARTO AL FINAL DESPUÉS DE ESTAR NOSOTROS 18 JORNADAS EN PUESTOS CHAMPÁN,ENTRARON EN LAS ÚLTIMAS TRES, PERO LO Q TU DICES ES LO NORMAL.
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