El Sevilla, tal y como predijo nuestro Presidente, José Castro, lo pasó mal, pero finalmente acabó clasificándose, aunque hubo que esperar hasta el minuto 94 del partido para ver el gol de M’Bia, que será por lo único por lo que será recordado este lamentable partido, tanto por parte del Sevilla como del Valencia (en los últimos 15 o 20 minutos).
Emery está siendo muy criticado por el partido de ayer, aunque yo, en este caso, no le considero el principal culpable del partido del Sevilla. Vi el partido por televisión, por lo que no puede ver bien cómo se desarrollaba el partido tácticamente, pero me dio la impresión de que si hay que achacar a alguien el pésimo rendimiento del equipo, hay que apuntar directamente a los jugadores. Y es que ninguno de ellos estuvo mínimamente acertado. Jugadores como Rakitic, M’Bia, Carriço –no me gusta verle en el centro del campo. Prefiero a Iborra–, Bacca, Reyes… estuvieron prácticamente desaparecidos, incapaces de mantener la posesión del esférico, y con una falta de intensidad alarmante. Intensidad que sí ponía el Valencia en cada acción. Así pues, me parecía más un problema de implicación y mentalidad de los jugadores que un mal planteamiento del partido.
Y en cuanto a los cambios, lo único que me pareció discutible fue el de Bacca por Gameiro, aunque, particularmente, creo que no fue un mal cambio. El Valencia estaba dominando por completo el centro del campo, por la gran calidad de sus jugadores –impresionante el partido de Parejo– y por esa intensidad de la que hablaba antes. En ese plan, quitar un jugador del centro del campo para ponerlo arriba me parecía muy arriesgado, pues probablemente, tendríamos grandes dificultades para hacerles llegar a los delanteros balones en buenas condiciones. Además, no hay que olvidar que ayer no fue precisamente el día de Bacca, quien estuvo muy desacertado.
Quien sí creo que falló, y de manera estrepitosa, fue Pizzi. Con un partido totalmente dominado, donde parecía más probable que llegara el 4-0 antes que el 3-1, se le ocurre quitar al mejor jugador del partido: Daniel Parejo. No sé cómo agradecerle a Pizzi ese cambio, porque a partir de ahí, el Valencia perdió la posesión, su chispa, su peligro, y se dedicó en cuerpo a alma al «otro futbol»: el marrullero, el antideportivo, ése que nunca debe verse en fútbol de alto nivel. Vaya espectáculo el que dieron, en toda una semifinal europea, Pizzi y Jonas, con sus descaradas pérdidas de tiempo. Querían llegar a la final costara lo que costara. Si había que tirar dos o tres balones al terreno de juego para perder tiempo, pues se tiraba. Desde luego, bien que se merecieron perder la eliminatoria en el tiempo de descuento, de la manera más cruel que puede haber.
Ese cambio de Parejo también fue como decirle al Sevilla: «Ahora os toca atacar y a nosotros defender por todos los medios». Y eso nos vino de perlas, puesto que el Sevilla estaba obligado a atacar, y a contrarreloj. Y si para ello nos ceden el centro del campo, pues miel sobre hojuelas. Fue un gran regalo que había que aprovechar. Y lo hizo M’Bia, sobre la bocina, tras cesión de Fazio. Y llegó el éxtasis, una alegría inmensa que es difícil de explicar. Nos íbamos a Turín, a pesar del penoso partido que realizamos.
Para llegar a Turín, hemos tenido que eliminar a otro gran equipo, como fue el Oporto. Porque el Valencia ha demostrado ser un gran equipo, y, ciertamente, no me explico cómo está tan mal clasificado en Liga. En mi opinión, el Valencia de ayer es bastante mejor que el que nos visitó hace una semana, puesto que Jonas y Alves son mejores que Guaita y Alcácer. Pero, afortunadamente, su entrenador, Pizzi, no estuvo a la altura de las circunstancias y se equivocó en el momento crucial de la eliminatoria.
Ayer no salió nada bien. Incluso la suerte nos dio la espalda: en el primer gol, desvía Coke el balón, el segundo llega tras dar en el larguero y Beto, y el tercero lo remató a placer Mathieu, al encontrarse un balón rechazado en el área pequeña. Todo lo tuvimos en contra, pero estamos en la final, que es lo único importante.
Gracias, Pizzi. Gracias, M’Bia. Road to Turín.
5 Stukas 
Yo ayer estaba a punto de echarme a llorar, se me vino el tiempo encima y por obligaciones de trabajo llegué tarde a encender la tele, justo antes de escuchar al locutor de 4 cantando el primero del Valencia como si fuese ché de toda la vida, había dejado tarea para hacer tras el partido y cuando era el minuto 90 y vi que sólo descontaba 5 casi me echo a llorar como te digo de pensar el resto de noche que me esperaba, sabía que ni iba a dormir.
Y entonces llegó ese saque de banda. Y sólo vi a Mbiá entrando desde atrás como un tren y de lo que pasó después te prometo que no me acuerdo, volví a ponerme delante de la tele cuando me di cuenta de que todavía quedaba medio minuto de partido, y ya vi que el árbitro pitaba el final.
Ya habrá tiempo de analizar lo de Emery y lo de algunos jugadores. Pero mientras, dedicarle una frase a los soprendentes aficionados «valencianistas» que hay en mi barrio sevillano y que ayer tiraban cohetes (literalmente) con el 3-0, una frase de una gran película: «nosotros hemos visto cosas que vosotros no creeríais».
Lo siento, Valencia, y lo siento, Cuatro.
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Pues yo no lo siento por el Valencia. Como digo en el post, se merecen todo lo que les ha pasado, e incluso más, si tenemos en cuenta el trato que recibieron los sevillistas que se desplazaron allí.
Mi alegría fue inmensa. Yo, desgraciadamente, tuve que soportar a mi novia cantar los goles del Valencia como si hubiera nacido allí. Y todo porque no quiere que me vaya a Turín. Pues se tendrá que aguantar, porque ya lo tengo todo cerrado, a falta de entrada, claro está.
Por cierto, la genial frase que dices, si no me equivoco, corresponde a Blade Runner. ¿Verdad?
Un saludo.
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Totalmente de acuerdo en lo que dices de Parejo. Pero totalmente. No he escrito sobre ello porque me he centrado en otras cosas, no en el partido en sí, pero pensé justo lo mismo que tú cuando vi el cambio.
A mi las decisiones de Emery no me gustaron. El once inicial sí, y es cierto que a los jugadores les pesó la responsabilidad (eso también pasa en fútbol). Pero yo hubiera cambiado a Reyes por Gameiro. Reyes no estaba, Gameiro ha jugado muchas veces cayendo desde banda, no se hubiera resentido el centro del campo y Bacca ha hecho muchos partidos malos y marcado. Porque Bacca tiene eso, gol. Te mete uno cuando menos te le esperas. Y nosotros necesitábamos un gol. Un solo gol, como pudimos ver finalmente.
De todos modos, esto es hablar por hablar. Yo creo que a los jugadores les vino grande el partido. Son jóvenes en su mayoría e inexpertos en este tipo de encuentros. Esperemos que en la final se relajen y se dediquen a disfrutarla. Que no se agarroten. Porque jugando como ayer, será imposible ganarla.
Un saludo.
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Yo creo que el equipo está notando su juventud y su falta de experiencia. En los partidos importantes hace falta personalidad y tener la cabeza fría, y eso lo dan los años. Pienso que ahí puede estar la explicación del rendimiento de los últimos partidos.
Ayer muchos jugadores no estaban, incluyendo a Rakitic, Reyes y M’Bia, que se supone son los que deben tirar del carro por experiencia y calidad. Yo culpo más a estos jugadores que a Emery, aunque reconozco que Emery también tiene buena parte de culpa. A fin de cuentas, él es el máximo responsable, para bien o para mal.
Un saludo.
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Como que no es el principal culpable es ademas de principal es UNICO CULPABLE de no plantear el partido de otra manera sino de encerrar al equipo. Es INADMISIBLE y encima lo renovaran incluso perdiendo la final que sera a cara o cruz como todas las finales sin un favorito claro. Que manera de tirar una eliminatoria y luego decia en rueda de prensa que esperaba e imploraba una accion como la de Palop o Iniesta. En fin que de nuevo ocurrio algo que es dificil por no decir imposible pero ocurrio y apesar de Emery el equipo esta en la final
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Yo no creo que Emery haya salido a encerrarse. De hecho, en los primeros minutos el Sevilla llegó en dos ocasiones al área valencianista, pero nuestros jugadores pecaron de individualismo y no pensaron en el equipo. Después el Valencia dominó el partido, pero porque nuestro centro del campo estaba desaparecido y no era capaz de imponerse al rival, que hizo un gran partido en la zona ancha. No creo que fuera porque el Sevilla se encerró. De hecho, pienso que era una buena idea jugar con un solo delantero. Lo que ocurre es que Rakitic estaba demasiado adelantado y el Valencia en la práctica tenía superioridad numérica y más posesión.
Del partido no se salva ningún jugador del Sevilla. Jugando así no tenemos ninguna opción ante el Benfica. Tenemos que creer que podemos ganar la final. Es cuestión de mentalización.
Un saludo.
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Sí señor, lo dice Nexus 6 segundos antes de morir.
Me imagino que ya lo habrás visto, por si acaso te lo mando: una recopilación de la narración del gol del SFC en las radios nacionales y locales. A disfrutar:
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Sí, pero gusta verlo más veces.
Gracias.
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hola chicos … felicitaciones por estar en la final. Yo soy un fan de la Juventus y tengo 4 entradas para la final de la Liga Europa Si usted está interesado por favor póngase en contacto conmigo … y espero que va a romper el culo a benfica! 😉
Los billetes se compran en el sitio web de la UEFA, tribuno de 2 y 2 de la curva … al alcance de cualquier tipo de pago y entrega
Lo siento … pero he usado el traductor de google …. 😉
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Hi, Filippo. Welcome to my blog.
I’m not interested in your tickets, but I’ll keep your message here.
Good luck!
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Primero de todo felicitar al equipo por llegar a la final. Hay que destacar que gracias a un gol injusto estamos en la final y sin hacer un juego expectacular, casi sin merecerlo. Hay que ser realistas que por mucho que seamos sevillistas emos tenido mucha suerte.
En el partido de ida tambíen les dimos pal pelo, (beto…). Asi que creo que estamos en igual de condiciones. No hay que despreciar a un equipo xcomo el valencia que sin hacer nada esta temporada casi nos la lía.
Saludos sevillistas
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Yo no estoy de acuerdo en que estemos en la final gracias a un gol injusto. Es cierto que el primer gol de la eliminatoria debió ser anulado, pero a partir de ahí, el árbitro barrió descaradamente para el Valencia, posiblemente porque ya era consciente de su grave error: un par de manos en el área que pudieron ser penaltis, faltas al borde del área inexistentes y varias tarjetas amarillas perdonadas. Además, el Sevilla tuvo varias ocasiones clarísimas de gol, para haber incrementado el marcador, aunque el Valencia también dispuso de alguna.
En el partido de vuelta, el Valencia fue bastante superior. Eso sí, tuvo una alta efectividad de cara a gol. Aparte de los tres goles, que fueron bastante afortunados –de rebote–, apenas tuvo ocasiones. El Sevilla tampoco creó peligro: la ocasión de Reyes, en boca de gol, y el gol de M’Bia que dio el pase a la final.
En general, creo que el Sevilla fue justo vencedor.
Por otro lado, creo que un equipo como el Valencia, que se dedicó de manera ruín a perder tiempo, de forma totalmente antideportiva, no debe pasar la eliminatoria. Fue su justo castigo. Todo el mundo pierde tiempo cuando va ganando, pero debe haber límites. Lo de Jonas simulando una lesión y el numerito de tirar dos y tres balones al terreno de juego, fue bochornoso.
De todas formas, da lo mismo que el Sevilla pasara justamente o no. Pasó, jugará la final, y es lo único que cuenta.
Un saludo.
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