Archivo mensual: abril 2014

Athletic 3 – Sevilla FC 1. Sin competir, imposible ganar

Lamentable partido, desde mi punto de vista, el que hizo nuestro equipo en San Mamés. Se puede perder, pero no de esta manera. Al menos, hay que intentar ganar el partido y ofrecer un poquito de fútbol. El Athletic nos superó en la primera parte sin hacer nada del otro mundo, pero tuvimos fortuna y llegamos al descanso con sólo un 1-0.

Quizás fuera un error salir de inicio con dos delanteros. El Athletic sobresale en el centro del campo, con jugadores técnicos y con mucha movilidad, como Ander Herrera y Muniain, que se complementan muy bien con Rico, que está haciendo una gran temporada. Ahí nos ganaron la partida, en la gran mayoría de las ocasiones, sobre todo porque ellos presionaban más y mejor. La diferencia de intensidad fue clave.

Creí, iluso de mí, que Emery aprovecharía  el descanso para hacer cambios, puesto que teníamos cuatro jugadores con tarjetas amarillas. Era el momento de ir a por el partido, porque el Athletic tampoco es que estuviera jugando a las mil maravillas.

Pues no. Mi gozo en un pozo. Los cambios no se hicieron hasta que llegó el 2-0, precisamente cuando ya era demasiado tarde. Poco después llegó la expulsión de Diogo, quien reincide con expulsiones absurdas –no le vendría mal una buena sanción– e inmediatamente el 3-0. Gol que no se puede permitir encajar un equipo de Primera División. Nunca te pueden rematar a placer en el corazón del área. Si eso ocurre, es que se ha defendido verdaderamente mal. Y es que ayer no fue precisamente el mejor día de nuestra defensa.

El árbitro no me gustó. Hizo el típico arbitraje sibilino, con diferente vara de medir a la hora de sacar tarjetas amarillas, lo que provocó que nuestros jugadores de contención se cargaran de tarjetas en el primer tiempo.

La sensación que me dejó el partido de ayer fue que el Sevilla no puso toda la carne en el asador, debido a que tanto los jugadores como Emery tenían puesta la cabeza en Mestalla. Nos jugábamos tanto como el Athletic, pero ellos sí prepararon su partido como debían. Quizás con una plantilla más amplia podríamos haber ido a por los dos objetivos. Pero se eligió ir a por la final de la Europa League. Esperemos que, al menos, este sacrificio sirva para llevar a Turín.

Sevilla FC 2 – Valencia 0. Gran paso hacia la final

El Sevilla dio, en el día de ayer, un gran paso para estar en la final de Turín, pero aún queda dar el otro paso, y, por lo que vimos ayer, no será en absoluto fácil.

El Valencia demostró ser un buen equipo. Me sorprendió lo bien plantado que estuvo en el campo y con la intensidad con la que salió de inicio, teniéndonos encerrados y dominando el partido durante los primeros veinte minutos del partido. También apretó bastante, rozando el gol en varias ocasiones, en distintas fases del partido.

Por cierto, hay que agradecerle a Pizzi que no alineara de salida a Jonas. Para mí, el brasileño es el mejor jugador del Valencia, y siempre es mejor que ese tipo de jugadores se queden en el banquillo.

En definitiva, debemos ser conscientes de que el partido de vuelta será bastante complicado, y tendremos que hacer las cosas bien si queremos pasar la eliminatoria. Los sevillistas sabemos, mejor que nadie, lo decisivo que puede resultar un campo lleno –magnífico el ambiente ayer en nuestro estadio–, así como un mal arbitraje o que la diosa Fortuna te dé la espalda.

El partido del Sevilla tuvo sus altibajos. Empezamos bastante desacertados, perdiendo el balón con facilidad y nos sentíamos incómodos sobre el césped. Después mejoramos bastante, marcando los dos goles, pero perdonando varios más clarísimos. Y acabamos el partido pasando muchos apuros. Incluso se nos apareció la Virgen en una mala salida de Beto, quien hizo algunas paradas de bastante mérito.

El arbitraje del tal Skomina, esloveno, no me gustó absolutamente nada, desde el primer minuto de juego. Incluso llegué a pensar que igual era aficionado del Maribor y que estábamos pagando su resentimiento por haberlos eliminado. Igual es que yo no soy objetivo, pero me daba la impresión de que no nos pitaba apenas faltas a favor –ni siquiera las más evidentes– y, sin embargo, al Valencia sí les señalaba, y con relativa facilidad, bastantes faltas, algunas de ellas inexistentes y muy peligrosas. Perdonó varias tarjetas a los jugadores rivales, pero la primera, como suele ser habitual, cayó de nuestro lado. También hubo un penalti clarísimo, por manos, que no pitó, a pesar de estar situado perfectamente… En fin, que no me gustó ni un pelo.

Es cierto que fuimos favorecidos en el primer gol, puesto que M’Bia estaba en un doble fuera de juego. El primero es difícil de ver, porque el camerunés estaba ligeramente adelantado y había muchos jugadores, de los dos equipos, casi en línea con él. Pero el segundo fuera de juego era clarísimo y sólo se entiende que no fuera señalado si el linier no vio que Carriço tocó el balón. No obstante, ese clamoroso error es achacable al linier y no a Skomina. Linier que, dicho sea de paso, también se equivocó favoreciendo al Valencia, abortando alguna que otra ocasion de gol, aunque, evidentemente, el primer gol desequilibra bastante la balanza.

Todo hace indicar que el partido de vuelta será a cara de perro, puesto que los dos equipos se juegan muchísimo. Al fin y al cabo, una final no se juega todos los días. Habrá que luchar hasta la extenuación para estar en Turín. Esta ventaja no debe hacernos creer que tenemos pie y medio en la final. Sería un grave error. Afortunadamente, por las declaraciones que oí ayer de Emery y algunos jugadores, parece que no hay peligro de que eso ocurra.

Obviamente, el haber sido capaces de mantener nuestra portería a cero tiene un enorme valor, puesto que, si conseguimos marcar en Mestalla, ellos lo tendrían verdaderamente complicado.

A sólo un partido de otra final europea. ¡Qué grandes!

Sevilla-Valencia: ansiedad no, intensidad sí.

Hace un par de días, un jugador del Sevilla decía que hay que controlar la ansiedad. Confío en que eso no se malinterprete por los jugadores y confundan la ansiedad con la intensidad.

En mi opinión, mañana el Sevilla FC debería encarar el partido con cuidado, siendo conscientes de que un gol en contra podría resultar fatal, pero también sabiendo que mañana hay que arriesgar, puesto que hay que llegar, a toda costa, a Valencia con ventaja. Aunque sea una ventaja menor –como un empate a cero–, pero con ventaja.

Por tanto, espero que el Sevilla muestre, desde el pitido inicial, una intensidad parecida a la que vimos contra el Oporto en nuestro estadio. Es decir, sin prisa pero sin pausa, como se suele decir. Es evidente que la prioridad es mantener la portería a cero, pero hay que marcar la pauta,  un ritmo que le haga saber al Valencia a saber que lo va a pasar muy mal. Lo peor que puede pasar es que el equipo ché se sienta cómodo y nos reciba en su casa con todo a favor. El Valencia no está en su mejor momento, pero tampoco es el Betis. Tiene jugadores de mucho nivel.

No conozco al árbitro de mañana, pero su forma de arbitrar puede ser decisiva. Si sigue el método permisivo de muchos árbitros europeos, nos puede perjudicar bastante, porque pienso que el Valencia hará muchas más faltas que el Sevilla.

Me gustaría que el Sevilla saltara al terreno de juego con sólo un delantero. La razón es por lo que decía antes: la prioridad es mantener la puerta a cero, y para ello es mucho mejor reforzar el centro del campo. Además, el jugar con un solo delantero no quiere decir que se pierda poder ofensivo. Ni mucho menos.

Ojalá tengamos mañana un alto porcentaje de efectividad de cara a puerta, porque así, en muchas ocasiones, no hace falta ni jugar bien para ganar. Afortunadamente, parece que no jugará Diego Alves, por estar lesionado. Mucho mejor para nosotros.

Nervioneo, engorilamiento… todo lo que se diga es poco. Mañana es una de esas grandes noches europeas de las que pocos equipos en el mundo pueden vivir. Disfrutemos de ella. ¡Qué ganas tengo de que llegue el partido de mañana!

M’Bia, entre Liverpool y Everton

Según L’Equipe, que se hace eco de una noticia de France Football, M’Bia no seguiría en el Sevilla, a pesar de la opción de compra.

El artículo dice así:

Cedido esta temporada en el Sevilla por el QPR,  Stéphane Mbia no debería quedarse en Andalucía, a pesar de la opción de compra del contrato de cesión con los Rojiblancos. De acuerdo con las informaciones de nuestros colegas de  francefootball.fr, el camerunés de 27 años está en contacto con el Inter de Milán, Liverpool y Everton. Finalizando contrato en junio, el antiguo jugador del Marsella duda aún entre los dos clubes ingleses. Ha disputado 18 partidos de liga esta temporada.

Sevilla FC 4 – Granada 0. El Sevilla ya golea sin querer

El Sevilla solventó el encuentro ante el Granada de manera brillante, sin pasar apuros y goleando casi sin querer, gracias también a la inestimable colaboración de la defensa visitante, que regaló los dos primeros goles.

Hasta entonces, el Granada controlaba bien el balón, pero sin crear ninguna ocasión de gol. Una vez ya con el marcador a favor, el Sevilla dominó por completo, a pesar de jugar a medio gas. Carriço  y M’Bia –otro partidazo del camerunés– eran un muro infranqueable para el Granada, que se desesperaba y recurría al disparo lejano. El centro del campo funcionó a la perfección, tanto en la contención como en la distribución, y si no llegaron más goles fue porque, incomprensiblemente, el Sevilla levantó el pie del acelerador. Y digo «incomprensiblemente», porque nuestra diferencia de goles a favor y en contra es inferior a la del Athletic, y sería una pena quedar fuera de Champions por ese motivo. Claro que para ello tendría que empatar el Sevilla en San Mamés, lo cual está por ver.

Y si el centro del campo funcionó a las mil maravillas, lo mismo se puede decir de la defensa: Fazio y Pareja lo despejaban todo, y los dos laterales también hicieron un buen trabajo.

Y arriba el Sevilla volvió a demostrar que tiene dinamita pura, a pesar de permitirse el lujo de tener a Bacca de suplente. Pero se olía el peligro en cuanto Marin, Rakitic o Vitolo enfilaban el camino a la puerta contraria. Y Gameiro remató la faena, marcando un gol y dando otro.

Cuando todas las líneas funcionan y se juega como un equipo, tanto en la labor ofensiva como la defensiva, lo más probable es que se gane con claridad. El Granada, prácticamente, no tuvo opción. Tiene algunos jugadores interesantes, pero ahora mismo está a años luz de este Sevilla que ya golea casi sin querer.

El árbitro no influyó para nada en el resultado, pero José Antonio Texeira Vitienes, a pesar de ser un partido sin ninguna complicación, dejó muestras de lo mal árbitro que es.

Ahora llega lo bueno. Lo bueno y lo difícil: una eliminatoria europea que nos puede dar el paso a otra final, y un partido donde nos jugamos las opciones de jugar la Champions. La pena es que Emery haya tardado tantísimo en darse cuenta de que el rendimiento del equipo con el doble pivote defensivo es mucho mayor, y de que haya confiado hasta la cabezonería en un Pareja que estaba en un estado de forma lamentable –no tenía nada que ver con el de ahora–. Si no hubiera sido por eso, el próximo partido de liga sería un trámite. Pero eso ya no tiene solución. Ahora sólo cabe mirar al futuro, que es muy prometedor: la Europa League asegurada, aspirando a Champions, en una semifinal europea y con una plantilla joven, la cual, si no se debilita mucho en verano y se refuerza con algunos retoques, puede dar mucho que hablar.

 

Sevilla-Granada. Partido complicado por múltiples factores.

El Sevilla puede confirmar en el día de mañana la clasificación para Europa, con lo cual es un partido muy importante, pero, al mismo tiempo, muy complicado, por varios factores:

1º.-  Como es lógico, todos los sevillistas tenemos más en mente el partido del próximo jueves que el de mañana. Es imposible que los jugadores se abstraigan de eso. Ademas, la cercanía y la importancia del partido contra el Valencia provocará que Emery tenga que hacer, forzosamente, rotaciones. El equipo está funcionando bien, pero siempre se pueden echar en falta jugadores importantes.

2º. – El Granada es un equipo que está mirando de reojo los puestos de descenso, aunque podríamos decir que con cierta tranquilidad, puesto que está a cinco puntos de la zona catastrófica. A pesar de eso, tiene jugadores de contrastada calidad, principalmente en ataque, como pueden ser: Brahimi, El Arabi, Piti o Ighalo. La pasada jornada sorprendieron al Barcelona. A nosotros no nos debe pasar lo mismo.

3.- El clima. Las previsiones para mañana son que caerán alrededor de 22 litros por metro cuadrado. Supuestamente, estará lloviendo todo el día, y también durante el partido. Esto es un fastidio para los aficionados, pero también para los jugadores, puesto que se incrementa el riesgo de lesión y estarán obligados a hacer un sobreesfuerzo físico. En teoría, un terreno impracticable o rápido beneficiaría más al equipo visitante, que se espera venga a encerrarse y contraatacar, como hacen casi todos los equipos a los que recibimos.

 Y 4º.- El árbitro. El trencilla de turno será uno de los hermanos Texeira. En este caso, Jose María. Los dos se dan tortas para ser el peor, pero se supone que el que nos pita mañana es el que tiene menos idea de arbitrar un partido de fútbol.

Por todo esto, considero que sería meritorio que el Sevilla fuera capaz de llevarse mañana los tres puntos.  A ver si tenemos suerte y vamos a San Mamés a jugarnos la Champions.

¿Cómo se dice «vete a la mierda» en croata?

Porque eso es lo que yo le diría al hermano de Rakitic, e incluso a Rakitic –al final se hace lo que él diga–, si lo que publica hoy Muchodeporte es cierto.

Es decir, hay acuerdo total con el representante y con el jugador, a falta de firma. Se mete el Madrid por medio, y ahora Dejan Rakitic dice aquello de «Donde dije digo, digo Diego». Pues no. Mal haría el Sevilla en renegociar lo ya negociado. Si Dejan Rakitic no sabe lo que es la seriedad, el Sevilla debe ser un ejemplo de ello. O se firma lo acordado, o no se firma nada. Se olvida la renovación y se trasapasa a Rakitic en verano, que es algo que todos sabemos que acabará sucediendo, haya renovación o no.

Supongo que no sería un problema encontrar un buen comprador para el croata, dado el sobrasaliente rendimiento que está dando esta temporada. Apuesto la mano derecha de otra persona –jamás lo haría con la mía– que a final de temporada se pelearán varios clubes, de los mejores de Europa, por nuestro jugador. Sé que Rakitic está en su último año de contrato, por lo que, a priori, el Sevilla no cuenta con la mejor posición para negociar una venta. Pero también sé que una subasta entre equipos de alto poder económico alcancaría cifras escandalosas. Y a esta clase de equipos no les gusta esperar ni un mes, así que mucho menos un año. Sólo hay que ver la barbaridad que pagó el equipo de Florentino por Illarramendi: 38’9 millones.

La pregunta que surge es evidente. Si Illarramendi costó 38’9 millones, ¿cuánto cuesta Rakitic? En mi opinión, si Rakitic va finalmente acaba recalando en el Madrid, si el traspaso no supera esa cantidad, sería una mal venta.

Yo este tema lo veo claro: o se firma lo ya pactado, o no se renueva y se vende a Rakitic en verano, sin tener que atenernos a una cláusula de rescisión absurdamente baja.

Y a Rakitic, y a su representante, que le vayan dando.

 

Betis 0 – Sevilla FC 2. El Sevilla se llevó el derbi invisible en un partido muy polémico

El Sevilla se llevó tres puntos importantísimos al vencer en un derbi que llegó casi sin avisar. El principal problema con el que se enfrentaba el Sevilla era que no había tenido apenas tiempo para preparar el partido, al haber disputado recientemente un intensísimo partido ante el Oporto, en Europa League. Lógicamente, Emery debía presentar un equipo en plenitud de facultades físicas, por lo que, prácticamente, estuvo obligado a renovar la mitad del equipo titular. Por contra, el Betis tuvo todo el tiempo del mundo para preparar a conciencia el partido. Salir vencedor del derbi era la única alegría que podría llevarse la afición bética en esta temporada, pero ni por esas.

El partido del Sevilla no fue bueno. Empezó mal, dominando con claridad el Betis, pero sin crear ocasiones de gol. La primera jugada polémica llegé en una entrada, dentro del área de Iborra a Baptistao. Lo vi por televisión, y a  mí me pareció penalti, aunque en las tomas que mostraron no se veía con claridad si el portugués tocó balón o no. El árbitro estaba bien situado y no pitó nada.

El Sevilla sólo inquietó algo en una contra de Gameiro, que se quedó solo ante el portero, pero se dejó ganar la partida por Amaya.

Pero la jugada que decidió el encuentro fue en un penalti polémico. Bacca se quedó solo ante el portero, tras hacer él mismo una obra de arte e irse de varios contrarios, y es derribado por Juan Carlos. Penalti y expulsión. A mí no me pareció penalti, y tras ver la repetición menos aún. Es cierto que el jugador bético derriba a Bacca, pero toca balón.  Pocos minutos antes había ocurrido una falta similar, a favor del Betis, en la frontal del área sevillista. Era una falta peligrosísima, pero inexistente, puesto que Alberto Moreno también tocó balón. Afortunadamente, se lanzó sin consecuencias.

A partir de aquí, Velasco Carballo demostró ser muy mal árbitro. Las dos jugadas polémicas anteriores, los dos posibles penaltis, eran jugadas de apreciación y difíciles de ver, y donde hay que tomar las decisiones en décimas de segundo. Pero tras el 0-1, logrado al transformar Gameiro el penalti, el árbitro, posiblemente por el remordimiento, intentó compensar en cada jugada, a favor del Betis, convirtiendo el partido en una retahíla de errores arbitrales, a cuál más grave.

El doble rasero del árbitro fue vergonzoso. Si enseña tarjeta amarilla a Trochowski por agarrar a un contrario, debe hacer lo mismo si el que agarra es un jugador bético. Y no lo hizo, no en una sino en dos ocasiones. Además, la amarilla que le enseñó a Vitolo fue de chiste.

También perdonó la segunda amarilla a Rubén Castro, en la jugada en que éste lesiona a Alberto Moreno. Y a N’Daye –o como se llame– también le perdonó la segunda amarilla,  hasta en dos ocasiones.

Por si fuera poco, erró al anular un gol a Carriço por fuera de juego inexistente y convirtió un penalti por manos claras y voluntarias en un fuera de juego, que tampoco existió. Aunque en esta ocasión el culpable fue el linier.

Este evidente afán de Velasco Carballo por compensar puso en peligro el resultado, hasta que Gameiro aprovechó un buen pase de Diogo para hacer el 0-2 y sentenciar el partido.

No fue un buen partido del Sevilla, que debió amarrar el partido mucho antes, pero lo importante es que se ganó, nos afianzamos en puestos de Europa League, y,  de paso, seguimos mirando de reojo los puestos de Champions, por si le da al Athletic por pinchar.

El protagonista del partido fue, sin duda, Velasco Carballo. No se puede errar tantísimo en tan poco tiempo. Y eso que es internacional. Si no recuerdo mal, este mismo árbitro fue el que nos birló tres penaltis contra el Valencia, en nuestro estadio.

Ahora, a seguir la racha en liga, ante el Granada y, después, a pensar en el partidazo de Europa League contra el Valencia. Dos partidos vitales donde no podemos fallar.

Y de repente, un derbi

Pues sí, estaba yo entretenido con mis cosas: partidazo de Europa League, el importantísimo partido del Sevilla Atlético, que sigue en su lucha por salvar la categoría, y, de buenas a primeras, me doy cuenta de que mañana, Domingo de Ramos, hay un derbi. Y lo cierto es que estaba ahí, escondido, agazapado, pero es una señal inequívoca de que los sevillistas ya vemos los derbis de otra manera.

Leía el otro día que el Betis había ganado en su campo 4 veces al Sevilla en los últimos treinta años. Quiero esto decir que habrá que ir con cuidado. Yo, al menos, no sabía que nos habían ganado tantas veces.

Será importante refrescar el equipo, pues a buen seguro notarán el gran esfuerzo al que nos obligó a realizar el Oporto. Además, no hay que olvidar que estuvimos casi toda la segunda parte con un jugador menos.

De todas formas, como siempre, confío en que ganará el Sevilla. Es obvio que el Sevilla es mucho mejor equipo, y quien no lo vea así, sólo tiene que echar un vistazo a la tabla clasificatoria.

El peligro del partido de mañana es el de siempre: que en fútbol no siempre gana el mejor.

Tres puntos en juego, tres puntos para acercarnos al Atletic y para seguir luchando por esa utopía que es ahora mismo la Champions League. Y también está en juego el que tengamos una Semana Santa tranquila, porque, si suena la flauta, aunque parezca increíble, volverán a salir de debajo de las piedras los de siempre.

Sevilla FC 4 – Oporto 1. El dragón nos duró media hora

Magnífico partido del Sevilla, de principio a fin, que superó con facilidad a un muy buen equipo, como es el Oporto. Para eso fue imprescindible la tremenda intensidad que ponían los jugadores sevillistas en cada acción, anticipándose y luchando en cada balón como si les fuera la vida en ello.

No empezó muy bien el partido, con un M’Bia que parecía que saltó dormido al terreno de juego, y fallando Bacca una ocasión clarísima de gol, en un mano a mano con el portero. Pero a los pocos minutos llegó el penalti –en mi opinión, inexistente–, perfectamente transformado por Rakitic; poco después, la genialidad de Vitolo, marcando el segundo; y finalmente, la puntilla de Bacca, que controló y se revolvió entre una multidad de defensas para lograr un 3-0 con el que se llegaba al descanso y que parecía definitivo.

Pero en la reanudación todo se volvió oscuro. Una estúpida expulsión de Coke, con cuarenta minutos por delante, pudo poner la clasificación muy difícil. Afortunadamente, Beto estuvo acertadísimo y la suerte también nos acompañó en alguna que otra jugada. Incluso creo que hubo un penalti a favor del Oporto que el árbitro no señaló.

En la expulsión de Coke, no sé quién tiene más culpa: si Emery por no cambiarlo, teniendo ya tarjeta amarilla o Coke, por hacer una fuerte entrada, además, totalmente  innecesaria. Me decanto por Emery, porque Coke ya había avisado de que estaba pasado de revoluciones, de manera que –ingénuo de mí– esperaba que el madrileño fuera sustituído en el descanso.

No obstante, a pesar de la inferioridad numérica, el equipo defendió con mucho orden y aprovechó los riesgos que estaba tomando el Oporto para conseguir el cuarto gol, que dejaba más que sentenciada la eliminatoria. El golazo de Quaresma, por suerte, quedó en anécdota.

Todo el equipo estuvo a un gran nivel: Beto, Fazio, M’Bia, Fernando Navarro, Bacca, Rakitic, Vitolo… partidazo de todos ellos. Por poner un «pero» al partido, la absurda expulsión de Coke, y que se fallaran ocasiones claras, como las Bacca o Gameiro, solos ante el portero.

Gran noche europea, inmejorable ambiente en las gradas, con remontada y final feliz. Ahora sólo queda esperar al sorteo, para ver si, una vez eliminado el dragón, ahora nos toca un águila, un murciélago o una señora vieja.

En mi opinión, el más fácil es el Valencia, aunque no me gustaría enfrentarme a ellos por ser un equipo español. El más complicado, la Juventus. Pero a ver qué nos depara el sorteo.

En semifinales de la Europa League. Casi nada.

El de hoy, el partido más importante de los últimos años

El partidazo de esta noche, en el Ramón Sánchez Pizjuán es, sin duda, el más importante que ha tenido el Sevilla en los últimos años. Es tan importante que convirtió el partido precedente, contra el Español, en un estorbo, y el siguiente, a pesar de ser un derbi, en una anécdota. Hay mucho en juego: prestigio, ilusión y dinero. Y sólo lo último es cuantificable.

Por tanto, el partido de hoy se presenta como lo que es: una gran cita europea que bien merece un ambiente de gala. Estoy seguro de que hoy el sevillismo alentará al equipo como nunca. Particularmente, la semana se me ha hecho eterna. Parece que fue hace un siglo cuando jugamos en Oporto, y sólo ha pasado una semana. Pero cuando llega un partido de este calibre, los días pasan muy despacio y se cuentan las horas y los minutos para que llegue el gran momento. Justamente ahora, cuando estoy escribiendo estas líneas, quedan doce horas exactas, ni un minuto más, ni un minuto menos.

Pasar la eliminatoria será muy complicado. Yo diría que la ilusión y las ganas de todo el sevillismo es proporcional a la dificultad que nos encontraremos hoy. Aunque un 1-0 parece una ventaja mínima, no es ni mucho menos así, por el valor doble de los goles en campo contrario. Por tanto, será fundamental tener mucha concentración y paciencia, puesto que encajar un gol nos pondría el pase casi imposible. Es lo que tiene el haber dejado nuestro casillero de goles a favor a cero en el partido de ida.

Como siempre, tener un mínimo de efectividad también será clave en el día de hoy. No se pueden fallar goles hechos, como en Oporto o en la anterior eliminatoria. Nuestro rival de hoy tiene mucha calidad, a pesar de tener bajas importantes. Es un equipo que es un grande de Europa, que procede de la Champions y que viene de eliminar al Nápoles. Tiene una gran plantilla e individualidades que pueden decidir partidos. Indudablemente, tendrá sus opciones de gol, por lo que más nos vale que marquemos al menos tres goles. Sin obsesionarnos, pero siendo conscientes de que con un 2-0, aunque pueda parecer lo contrario, estamos al borde del abismo.

Tácticamente, me gustaría que Emery planteara un partido con doble pivote defensivo y un solo delantero, y que Carriço fuera el acompañante de Fazio, aunque esto último, por lo que se ve, parece mucho pedir. La pelea en el centro del campo se antoja vital y, dada la fortaleza del rival, muy interesante. En mi opinión, una buena defensa debe ser la prioridad, y debe empezar en el centro del campo, por lo que pienso que M’Bia e Iborra deberían ser titulares.

Ojalá, el partido de hoy lo tengamos presente en la memoria durante muchos años, por haber pasado a semifinales, pero si no fuera así, no nos queda otra que agradecer a la plantilla que nos haya permitido vivir una noche futbolística como la de hoy.

Qué ganas tengo ya de que empiece el partido. ¡Y qué despacito va el reloj!

Pase lo que pase, ¡VIVA EL SEVILLA!

Sevilla FC 4 – Español 1. El Sevilla se garantiza estar en Europa la próxima temporada

Aunque el Sevilla aún no ha conseguido matemáticamente plaza Europea, es prácticamente imposible que no juguemos en Europa la próxima temporada, pues la victoria de ayer, aunque no lo pareciera, fue ante un rival directo. Tanto el Español como el Valencia y el Levante son los tres equipos que aspiran a meter el cuello en puestos Europeos. Hoy le sacamos 13, 12 y 13 puntos, respectivamente, si bien el Levante ha disputado un partido menos.

Por tanto, muy mal tendríamos que hacerlo en este final de temporada, y muy bien lo tendrían que hacer estos equipos, para quedarnos fuera de Europa. Este desastre es casi tan improbable que ocurra como que el Sevilla se clasifique para Champions. Sólo ganando en San Mamés se podría considerar al Sevilla un aspirante serio para la cuarta plaza. Y eso no es nada fácil.

En cuanto al partido contra el Español, me pareció un claro ejemplo de lo importante que es tener unos buenos centrales y un portero. El Español se plantó en el césped sin sus dos centrales y portero titulares, y bien que se notó durante todo el partido. Los dos primeros goles, jamás habrían llegado de haber tenido nuestro rival unos centrales medio decentes. En el primero, M’Bia cabecea a placer casi en el área pequeña, y en el segundo, a Gameiro casi le da tiempo a tomarse un café antes de ponerla junto al poste.

Y también fue un claro ejemplo de que en el fútbol profesional no cabe la relajación ni el exceso de confianza. Increíble los 20 minutos tontos que tuvimos que sufrir los sevillistas al inicio de la segunda parte. El penalti que concedió Fazio no pudo ser más absurdo. Pero lo peor fue que estuvimos noqueados un buen rato, donde el Español pudo conseguir el empate en un par de ocasiones. Menos mal que Gameiro sentenció el partido, pero esto ocurrió ya en el minuto 87. Rakitic remató la goleada en el minuto 89, tras sensacional pase de Nico Pareja. Germán, el guardameta visitante, pudo hacer más, quizás esperando que Rakitic centrara y no disparara a puerta.

A pesar del contundente resultado, el Sevilla no hizo un gran partido. En cierto modo, es normal, puesto que este partido, en realidad, era un incordio. Todo el mundo tenía puesta la mente en el partido del jueves, hasta el punto de que Emery pudo permitirse el lujo de prescindir de salida de varios jugadores importantes. Afortunadamente, el Español llegaba muy mermado, porque, si no, todo podría haber sido muy distinto.

Y ahora, a pensar en el partidazo del jueves, donde tendremos que hacerlo muy bien para pasar la eliminatoria. No sólo porque tenemos que darle la vuelta a un marcador muy adverso, sino porque el Oporto no es como el Betis, ni como el Español. Pero, ¿quién dijo que fuera fácil?

Oporto 1 – Sevilla FC 0. Buen resultado, si tenemos en cuenta las circunstancias

Obviamente, perder por 1-0 en Europa es muy mal resultado, puesto que, de recibir un gol en el partido de vuelta, nos pondría la eliminatoria casi imposible. Pero después de ver el partido, y analizándolo fríamente, el resultado no se puede considerar tan malo. Inluso yo diría que es un buen resultado, puesto que el Oporto pudo dejar la eliminatoria sentenciada.

Las circusntancias a las que me refiero en el titular son:

1º.- Desde mi punto de vista, Emery se equivocó tanto en la alineación titular como en el planteamiento. No alcanzo a comprender que, teniendo sólo disponibles a dos centrales –claro error de planificación–, Emery prefiera poner a uno de ellos en el centro del campo, y en el centro de la defensa poner a un lateral. Máxime cuando se preveía, dada la calidad del rival, que la defensa iba a tener mucho trabajo. Además, tampoco es que Carriço destaque precisamente en la zona ancha. En mi opinión, Emery debería haberse decidido por Trochowski o Luismi como acompañante de Iborra, pero nunca por Carriço. Todo es más fácil si los jugadores ocupan las posiciones donde mejor rinden.

Y pienso que también se equivocó en el planteamiento, puesto que los dos pivotes defensivos estaban demasiado atrasados, cediendo el centro del campo al rival. Así que no era de extrañar que apenas creáramos ocasiones de gol y que el partido fuera, prácticamente, un monólogo del Oporto.

2º.- La actitud de los jugadores y de Emery. Hay que ser conscientes de que el Oporto es superior a este Sevilla, pero también de que no se puede saltar al terreno de juego con una actitud tan timorata. Para colmo, en el día de ayer todos los jugadores estuvieron a un nivel pésimo, exceptuando a Beto. Gracias a él, a sus buenas paradas y a un par de postes salvadores, tendremos opciones para la vuelta. Especialmente decepcionante fueron los minutos de Vitolo y, sobre todo, de Gameiro, lo cual hace que me pregunte por qué no juega más Jairo. Increíble lo que falló el francés, con toda la portería para él y a placer. Lamentablemente, ese error lo podemos pagar con la eliminación.

En cuanto a los cambios, no entendí que quitara a Iborra, a no ser que fuera por lesión.

3º.- El árbitro. Me pareció muy casero desde el primer momento, cuando enseñó una tarjeta amarilla a Alberto Moreno por una falta normalita. Sin embargo, perdonó a los jugadores del Oporto varias tarjetas claras. El gol portugués vino precedido de un córner inexistente y me dio la impresión de que –no me fijé bien– dejó sacar la falta en una posición más atrasada de donde se había cometido. También perdonó la segunda amarilla a Jackson Martínez, en una acción en la que Alberto Moreno picó de pardillo. Era una clara entrada por detrás, sin posibilidad de jugar el balón. El colombiano podría haberle hecho mucho daño y no habría estado mal que Alberto Moreno se hubiese quedado doliéndose en el césped, aunque exagerara un poco. Quizás, los teatreros Cesc y Cañas podrían darle unas clases.

En definitiva, teniendo en cuenta el partido tan desastroso que hicimos, a todos los niveles, que, además, se nos apareció la Virgen en un par de ocasiones, y que el Oporto, que fue muy superior, nos perdonó y nos dejó vivos… creo que el 1-0, dentro de lo malo, es de lo menos malo que nos podía haber pasado. Un segundo gol habría sido demoledor, y estuvieron a punto de conseguirlo en varias ocasiones.

Lo único positivo del partido de ayer es que, para el partido de vuelta, recuperaremos a Fazio y M’Bia –perdemos a Alberto Moreno– y el Oporto no podrá alinear a dos de sus mejores jugadores: Jackson Martínez y Fernando.

Por supuesto, la eliminatoria está muy complicada, sobre todo si no somos capaces de mantener la puerta a cero, pero, al menos, tenemos una opción, aunque pequeña, de pasar. Desde mi punto de vista, es más complicado remontar esta eliminatoria que la del Betis, sencillamente porque el Oporto es muy superior.

Lo mejor del partido, sin ninguna duda, fue nuestra afición. Impresionante. Me quedo sin palabras. Lo demás, para olvidarlo.

El Oporto, nuestro primer rival serio en la Europa League

Tengo ganas de ver el verdadero nivel que puede dar el Sevilla en esta Europa League, pues, hasta ahora, sólo nos hemos enfrentado a rivales menores. Aún así, varios de estos equipos nos han puesto en apuros. Incluso casi nos elimina el Betis. Sin ánimo de desmerecer al que dicen que es nuestro eterno rival, yo achaco las dificultades que tuvimos en la pasada eliminatoria a las lesiones que nos mermaron en defensa, en el partido de ida, y en el centro del campo, en el partido de vuelta. De no haber sido así, supongo que no habríamos tenido ninguna dificultad en llegar a Cuartos.

Ahora ya, en Cuartos de Final, nos enfrentaremos a un verdadero equipo, repleto de importantes individualidades y acostumbrado a conseguir grandes éxitos deportivos. En este enlace de El Desmarque hacen un buen análisis del Oporto, y, la verdad, es que se trata de un equipo de primer nivel. Eso tiene la ventaja de que, si nos eliminan, no podría considerarse un fracaso nuestra participación europea, y si conseguimos pasar la eliminatoria, estaremos a un paso de la final, y con la moral a tope.

No obstante, hay que tener en cuenta que la tarea, a priori, va a ser harto complicada. Hay un dato que no se puede obviar: este Oporto se ha clasificado para Cuartos tras eliminar al Nápoles, que es otro grandísimo equipo, con jugadores como Henrique, Jorginho, Behrami, Inler, Hamsik, Callejón, Insigne, Pandev, Higuain… Es decir, por mucho que digan que es el peor Oporto de los últimos años, eso no quiere decir que sea un rival fácil de batir. Ni mucho menos.

Así pues, no sólo estamos ante un gran rival, sino que posiblemente, sea superior a nosotros. Eso quiere decir que, si queremos llegar a semifinales, tendremos que cometer muy poquitos fallos, y por supuesto salir vivos del Estadio do Dragao.

Como en todas las eliminatorias, será importantísimo marcar en campo contrario. Por ello, no conviene ponerse nerviosos si nos hacen gol y recordar que hay un partido de vuelta, que es algo que se le olvidó a Emery en la ida contra el Betis y que nos complicó mucho la remontada. Un 2-0 parece muy mal resultado, pero un 2-1 da bastantes opciones para pasar a semifinales al calor de nuestra afición.

Por último, decir que no me gusta nada que se diga, incluso desde el club, que este Sevilla tiene muchas similitudes con el de 2006. Ni mucho menos lo veo así. Aquel equipo tenía varios jugadores que se podrían considerar de los mejores del mundo en su posición, como podrían ser Palop, Javi Navarro, Dani Alves, Jesús Navas, Luis Fabiano o Kanouté. Desde mi punto de vista, este Sevilla no se puede considerar, ni por asomo, que está al mismo nivel que aquella que nos dio tantos títulos y alegrías. Si así fuera, muy probablemente levantaríamos un nuevo título esta temporada. Y eso son palabras mayores.

FIFA sanciona con dureza al Barcelona y a la RFEF (Resolución)

FIFA ha dejado claro al Barcelona y a la Federación Española de Fútbol que las reglas están para cumplirlas. En Europa no pueden hacer lo que les da la gana, que es a lo que están acostumbrados a hacer en España, y FIFA ha sancionado al FC Barcelona con no poder fichar durante los dos próximos mercados de fichajes, el de verano de 2014 y el de invierno de 2015, y multas de 370.000 euros para el Barcelona y de 400.000 euros para la Federación.

La comunicación que ha hecho pública la FIFA puede leerse en su web oficial:

La Federación Española y el FC Barcelona sancionados por transferencias internacionales de jugadores menores de edad

El Comité Disciplinario de la FIFA ha sancionado a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y al club español FC Barcelona por incumplimiento de las normas relativas a las transferencias internacionales y registros de jugadores sub-18.

Las sanciones son consecuencia de las investigaciones llevadas a cabo incialmente por el Sistema de Transferencia de FIFA (FIFA Transfer Matching System GmbH –FIFA TMS–) durante el año pasado, y, posteriormente, por el Comité Disciplinario de FIFA, como participante en los procedimientos disciplinarios. Se ha estipulado que la RFEF y el FC Barcelona han violado varias Disposiciones relativas a la transferencia internacional e inscripción de jugadores menores, de nacionalidad no española, con el club, así como otras importantes reglas con respecto al registro y participación de algunos jugadores en competiciones nacionales. Las investigaciones abarcaban a varios jugadores menores que fueron registrados y participaron en competiciones con el club durante varios períodos, entre 2009 y 2013.

Actualmente, la principal Disposición relativa a la protección de menores en el contexto de las transferencias internacionales es el artículo 19 de las Normas sobre el Estado y Transferencia de Jugadores. De acuerdo con el artículo 19, las transferencias internacionales de jugadores están únicamente permitidas en el caso de los jugadores que tengan más de 18 años. Sin embargo, el mismo artículo estipula que las transferencias de jugadores menores están permitidas en tres casos específicos, y tales excepciones sólo pueden ser concedidas tras una evaluación por el subcomité del Comité del Estado de los Jugadores.

A este respecto, el Comité Disciplinario hizo hincapié en que la protección de los menores en el contexto de las transferencias internacionales es un importante asunto legal y social que concierne a todas las partes interesadas en el fútbol. Sobre todo, el Comité resaltó que mientras las transferencias internacionales podrían, en casos específicos, favorecer la carrera deportiva de los jóvenes jugadores, es muy probable que sean contrarias a los intereses de los jugadores menores de edad. Basándose en este análisis, el Comité concluyó que «el interés en proteger el correcto y sano desarrollo de un menor debe prevalecer sobre puros intereses deportivos»

El Comité Disciplinario subrayó que FIFA se toma muy en serio la protección de los menores en el fútbol. La protección de los menores es uno de los principios fundamentales incluídos en el acuerdo cerrado entre FIFA, UEFA y la Comisión Europea, en 2001. El Comité Disciplinario reconoció que los jugadores de fútbol jóvenes son vulnerables a la explotación y abuso en países extranjeros sin el control adecuado. Este hecho en particular hace que la protección de los menores en el fútbol por las instituciones gubernamentales deportivas, especialmente por parte de la FIFA, sea incluso más importante.

Con respecto al caso en cuestión, se ha considerado que el FC Barcelona ha incumplido el artículo 19 de la normativa, en 10 casos con jugadores menores y de haber cometido además otras infracciones concurrentes con respecto a otros jugadores, incluyéndose en el Anexo 2 de las Normas.

El Comité Disciplinario consideró las infracciones como graves y decidió sancionar al club con una prohibición para realizar transferencias, tanto a nivel nacional como internacional, durante dos períodos de transferencias completos y consecutivos, junto con una multa de 450.000 francos suizos (370.000 euros). Adicionalmente, se le ha concedido al club un período de 90 días para regularizar la situación de los jugadores menores implicados.
En cuanto a la RFEF, el Comité Disciplinario determinó que la asociación también ha quebrantado el artículo 19 de las Normas y otras Disposiciones relativas a la transferencia e inscripción de varios jugadores menores de edad. A este respecto, la RFEF ha sido sancionada con una multa de 500.000 francos suizos (400.000 euros) y se le ha concedido un período de un año para regularizar su marco regulador del sistema que se ocupa de la transferencia internacional de jugadores menores en el fútbol. Además, a la RFEF y al club se les ha remitido una amonestación, de acuerdo con el artículo 14 del Código Disciplinario de FIFA.

El sistema de transferencia basado en web (TMS) se hizo obligatorio para todas las transferencias internacionales de jugadores profesionales masculinos, en el ámbito de fútbol 11, en octubre de 2010. Ya en 2009 el uso de TMS fue obligatorio para todas las inscripciones de menores o transferencias internacionales de menores, de acuerdo con el artículo 19 de las Normas.

FIFA TMS, fundada como filial de FIFA en 2007, estableció un programa de conformidad a estas reglas en 2010, con el fin de que todas las transferencias internacionales de jugadores de fútbol profesionales se realizaran a través de TMS, de acuerdo con las Normas, para que sea posible el control en TMS de la integridad del comportamiento y los datos de los clubes y asociaciones. Los casos que impliquen el quebranto de las Normas, en particular los Anexos 2 y 3, son identificados e investigados y, cuando proceda, remitidos al Comité Disciplinario de FIFA, para su evaluación y toma de decisiones. FIFA TMS supervisa la actividad de las transferencias que se llevan a cabo usando inteligencia de mercado desarrollada internamente, fuentes externas e información recibida de los departamentos de FIFA Players’ Status & Governance y Disciplinary & Governance.

Así que, visto lo visto, como no medie recurso del Barcelona y se le levante la sanción, me da la impresión de que Fazio no fichará por el Barcelona.