Pocos méritos hizo el Sevilla para no salir derrotado de su estadio, por segunda vez esta temporada. No es que el Celta hiciera mucho más que el Sevilla, pero, al menos, nos superó en ganas.
La primera parte fue para olvidar. Emery sigue empeñado en convertir en un correcalles el centro del campo, y eso es jugársela a cara o cruz. En la segunda parte, probablemente quiso conseguir más posesión, pues el Celta dominaba el partido y el control del balón. Pero fue quitar a Bacca y meter a Cristóforo, y a partir de ahí todo salió mal.
A favor de Emery, en esta ocasión, es que él no tiene absolutamente nada de culpa en que hoy fuera el día tonto de Beto. El portero portugués tuvo algunos detalles de falta de concentración, ciertamente alarmantes. Pero no fue hasta los primeros minutos de la segunda parte, cuando no metió la pata de forma decisiva. De nuevo, regalamos un gol. Cuando no es el portero, es el central, el lateral… siempre tenemos errores de bulto, y, claro, esto es Primera División. Aquí no se perdona.
A partir de aquí, la precipitación se apoderó del equipo y todo se hizo más complicado. Pero cuando ya se puso el panorama negro azabache fue cuando Gameiro se lesionó y Cristóforo quedó tocado. El francés se está disolviendo como un azucarillo en agua. Poco queda de aquel que deslumbró en las primeras jornadas.
Tampoco nos acompañó la suerte. Si al menos el poste no hubiera rechazado aquel remate de M’Bia…
Por cierto, el árbitro era más malo que un dolor de muelas. Pero fue malo para los dos.
El tiempo se le acaba a Emery. Yo ya dejé de confiar en él desde el partido de Valladolid, pero lo malo es que no lo largarán hasta que no estemos más abajo aún. En cualquier caso, creo que a Emery le queda poco en Sevilla, sobre todo si no cambia la forma de plantear los partidos. Y Emery ya ha demostrado, de sobra, que es lo suficientemente cabezota como para no hacerlo.
Esta deberia de ser la gota que colmara el vaso pero como al señor condenado no le da por echar al peor entrenador de la historia del club que siga la cosa como va hasta que no haya solucion.
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Alberto, después del partido de ayer yo creo que está claro que no es cuestión de suerte, el equipo está mal dirigido.
Me cuesta recordar un partido esta temporada (incluida Uefa) en el que no hubiera desde los primeros minutos desajustes defensivos. Cuando nuestro rival es inferior (Rayo, Almería, Osasuna y los europeos) si tenemos suerte no aprovechan nuestros fallos y no nos marcan; si tienen suerte y aciertan una de ellas (Valladolid, Celta) nos marcan, y si son superiores directamente palmamos (Madrid, Barça, Valencia, Atletico).
Al principio pensaba que era culpa de nuestros poco contundentes -por ser diplomático- defensas (Fazio, Cala, Diogo). Luego empecé a sospechar del esquema táctico. Ya creo que es una suma de ambos a la que se añade la ESCASÍSIMA CAPACIDAD del técnico de imprimir carácter a este equipo. No sé si me expreso con el término correcto, llámenle carácter, garra, huevos o entrega, todos sabemos lo que es, lo que le ponen Caparrós o Simeone a sus equipos, vaya.
Este es el principal problema, creo yo, al que se le añaden otros como por ejemplo tener el equipo claramente descompensado entre el ataque (buenos mimbres) y la defensa (del tebeo, teniendo pasta para haber fichado defensas de verdad). Y ahora encima tenemos una preparación física que hace que si presentas el carnet de sevillista te puedas matricular en enfermería y directamente te convalidan el primer año de patología y anatomía.
Yo me pregunto -inocente de mí- ¿por qué el SFC sólo puede tener los típicos entrenadores facilones que nunca protestan de nada? Fíjate en eso, todos supercómodos de llevar, Míchel (estaba encantado de estar aquí y para él Del Nido era Bernabéu reencarnado), Marcelino, Manzano, Unai… Todos del gremio de la actitud positiva. ¿No hay ninguno que vea nada mal? ¿Que no sea capaz de decir que le fichen a un defensa en condiciones, o que proteste de la preparación? Al contrario, todo está bien y vamos a quedar justo por debajo de los dos galácticos, y por qué no la 3ª Uefa….
En fin, perdona por alargarme tanto en el comentario, es que de alguna manera hay que desahogarse.
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Estoy de acuerdo contigo. Pienso que la situación actual del Sevilla viene dada por varios factores:
En primer lugar, la falta de garra. Por lo general, el equivo rival presiona y lucha más que nosotros. Nuestros jugadores más «guerreros» son Cristóforo y M’Bia, y, por ahora, el primero es un suplente de lujo, y el segundo está dando una de cal y otra de arena. Es evidente que la plantilla tiene carencias, pero si, además, se echa en falta casta y coraje, como dice nuestro himno, pues entonces se agrava todo.
En segundo lugar, el bajo nivel de la defensa. Todavía está por ver, pero parece que el fichaje de Carriço ha sido un acierto. Al menos, me ha gustado bastante los partidos que ha hecho. Lo que está claro es que, en general, el nivel de la defensa deja bastante que desear. Sólo mantiene el tipo Alberto Moreno –aparte del ya mencionado Carriço–. A Fazio no sé cómo calificarlo, porque suele cometer errores, pero también ha hecho partidos muy completos. El argentino Pareja, me da la impresión de que ha venido algo lento. También ha estado mucho tiempo parado, por una lesión, pero, por el momento, me está decepcionando. Y Fernando Navarro… es que ni siquiera es central. Es sólo un remiendo. En cuanto a Cala, le pasa lo mismo que a Fazio: alterna partidos malos con buenos. Y en el lateral derecho, ni Coke ni Diogo son capaces de cerrar el lateral defensivamente. Ofensivamente aportan algo, pero lo más importante es que cumplan en defensa, y no lo hacen.
Si miramos a la portería, estamos en las mismas: Beto ha tenido muy buenas intervenciones, pero en muchas ocasiones da la impresión de que puede hacer más en los goles que encaja. Y para colmo, lo que ya le faltaba es el gol que regaló al Celta. Por otro lado, a Varas ya lo conocemos: le cuesta salir de debajo de los palos y también, al igual que Beto, es capaz de lo mejor y de lo peor.
Y por último, la causa más importante, es Emery. Nuestro entrenador da la sensación de estar perdido. Tiene una idea en la cabeza, pero no consigue llevarla a la práctica manteniendo el equilibrio. No puede ser que la consecuencia de perder el balón en el centro sea que el rival nos llegue en tromba. Y encima, perdemos el balón con una facilidad pasmosa. Todo eso es culpa del entrenador. Y no me olvido de los cambios tan disparatados que hizo, por ejemplo, en Valencia o Valladolid, o contra Osasuna en casa, que nos llevó a pasar apuros hasta en superioridad numérica.
En definitiva, yo creo que, cuanto antes echen a Emery, mejor. Lo malo es que probablemente tendremos que perder en Barcelona para que lo echen, y puede que ni aún así.
Por cierto, si tu mensaje era largo, el mío no se queda corto 🙂
Un saludo.
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