Archivo mensual: octubre 2012

Si sólo hubieran sido dos errores

Titulaba un conocido diario ayer que el Sevilla perdió contra el Zaragoza por dos errores en defensa. Ojalá hubiera sido así, porque entonces habríamos ganado el partido.

El Sevilla cometió muchos más errores. Para empezar, y quizás el más importante, el no tratar al rival como se merece. Es decir, no se puede jugar andando aunque el equipo al que te enfrentes esté en la zona baja de la tabla. Precisamente, por ese motivo los jugadores rivales irán a por todas en cada balón. Por tanto, si nosotros no corremos tanto como ellos, tenemos todas las papeletas para perder el partido. Es una cuestión de mentalidad, de darse cuenta de que te dan tres puntos tanto por ganar al Madrid como por ganar al Celta o al Zaragoza.

Para empeorar las cosas, esta temporada nuestros rivales estarán más concentrados cuando jueguen contra nosotros, puesto que inmediatamente después deben enfrentarse a Madrid, Deportivo y Barcelona. Y ya sabemos lo que suele ocurrir cuando se enfrenta uno con el Madrid y el Barcelona.

Pero aparte de la poca mentalidad y los errores en defensa, también somos reincidentes en los errores en ataque. Es normal que se fallen ocasiones de gol, pero lo que no se puede fallar nunca es cuando te quedas completamente solo delante del portero. En Primera División esas ocasiones tienen que acabar en gol, y ni Negredo ni Babá fueron capaces de materializarlas ayer. Y al final, tanto cuesta un error en el area propia como en la ajena.

Demasiados errores, y además muchos de ellos provenientes de jugadores que hasta ahora se habían mostrado muy seguros, como son los casos de Botía y Medel. Confiémos que se haya tratado de un mal día, porque estos jugadores deben ser claves en el equipo.

Por último, me pregunto por qué no sigue probando Míchel a jugadores en la banda izquierda. ¿O es que aún no se ha dado cuenta de que la solución no es Manu Del Moral? Pienso que, mientras Perotti recupera la forma, se debería buscar otras alternativas. Y si hay que llegar hasta el filial, pues que se llegue. Que para algo lo tenemos.

El próximo partido de liga es contra el Levante. Otro partido importantísimo. De ganar, nos mete de nuevo en Europa. De perder, nos alejaría de la zona Europa League. Y quién sabe hasta cuando.

Jugando así, lo normal es perder

El Zaragoza se ha llevado los tres puntos sin hacer gran cosa, pues simplemente se ha limitado a aprovechar los dos regalos que le hemos dado en defensa.

El primer gol llega en una entrega defectuosa de Medel y el segundo en un tremendo fallo de marcaje de Botía, que además no hace bien el fuera de juego. Este último gol ha sido clave porque fue en el último minuto de la primera parte.

El equipo ha estado mal tanto ofensiva como defensivamente. Si queremos puntuar, no se pueden fallar ocasiones de gol tan claras como las de Negredo, con el 0-0 en el marcador, o la que tuvo Babá, ya con el 2-1.

También Rakitic y Del Moral tienen que aportar mucho más de lo que lo han hecho hoy. Sobre todo el croata, porque del Jiennense no podemos esperar mucho.

El árbitro mostró el nivelito del coletivo arbitral en España:  muy mediocre. Al final llegó incluso a desesperar a los jugadores sevillistas con sus absurdas decisiones.

Volvemos a tropezar en la misma piedra, volvemos a caer con un equipo muy inferior, y así va a ser complicado lograr los objetivos. Ahora sólo queda olvidar el nefasto partido de hoy y pensar en el próximo.

Trochowski no tendrá sustituto

Los ocho meses que estará de baja Trochowski podrían hacer pensar a más de uno que el Sevilla debería buscar un sustituto al alemán, que dicho sea de paso estaba haciendo un magnífico inicio de temporada. Pero parece que no será así, por mucho que algunos medios ya se apresuren a soltar nombres, como el del peruano Carlos Zambrano, para enero.  Del Nido ya ha dicho que no vendrá nadie, y, según se desprende del artículo que publica hoy Roberto Arrocha en ABC, todo parece indicar que verdaderamente será así y  no habrá ninguna incorporación.

En mi opinión, el club acierta de lleno con esa postura. Para cubrir la banda izquierda hay jugadores de sobra, y más ahora, con la reciente y esperada incorporación de Diego Perotti. Y en todo caso, teniendo en cuenta la mala situación económica del club, si ningún jugador estuviera a la altura esperada, me parecería más lógico y menos arriesgado que el Sevilla tirara de cantera, antes que ir a fichar a un jugador aprisa y corriendo, el cual, para más inri, tendría que estar jugando la liga española. Sería casi un crimen cerrar el paso a jugadores que vienen apretando fuerte en el filial, como, por ejemplo, Alberto Moreno, que está creciendo a pasos agigantados.

Ojalá podamos ver pronto a un Perotti plenamente recuperado, o al Reyes que no hace mucho tiempo marcaba diferencias con su calidad en otros equipos. Sería muy importante volver a tener una banda izquierda que desborde, para que así el equipo pueda encontrar más equilibrio y sea menos predecible en su juego.

Y, por supuesto, ojalá podamos contar ya la próxima temporada con un Trochowski totalmente recuperado y dispuesto a triunfar en el Sevilla.

Dos puntales del Sevilla y dos detalles incomprensibles

Si algo me quedó claro del partido de ayer fue que, hoy por hoy, tanto Gary Medel como Alberto Botía son dos firmes puntales del equipo. Se nota una barbaridad cuando no están sobre el tapete.

El Sevilla fue muy superior al Mallorca, de principio a fin, pero la fragilidad ofensiva que mostró nuestro equipo fue alarmante. El Mallorca sólo tuvo que aprovechar nuestra falta de contundencia atrás para llegar al descanso por delante en el marcador. Afortunadamente, esta fragilidad es algo que supuestamente se solucionará en cuanto se incorporen los dos jugadores mencionados.

Por lo demás, me gustó mucho el partidazo que hizo Rakitic. El croata jugó muy bien y además luchó bastante. Al igual que Negredo. El vallecano parece otro. Este Negredo sí que vale los 15 millones que se pagaron en su día. A ver si sigue en el mismo plan por mucho tiempo.

Lo mejor del partido fue la vuelta de Perotti. El argentino puede ser muy importante en lo que resta de temporada, dado que Trochowski estará 8 meses de baja, Del Moral y Reyes no están, ni se les espera, y Luna no parece contar para Míchel. En el ratito que jugó Perotti se le vio con muchas ganas. Lógicamente, aún le falta coger ritmo y forma física, pero todo llegará con el tiempo.

También destacar el partido de Cicinho, que compensó su error en el primer gol mallorquín asistiendo a Negredo en su segundo gol y marcando el gol de la victoria. Se volvió a entender perfectamente con Navas. Por cierto, menos mal que Navas no ve puerta con facilidad, porque si no, ya nos habrían quitado al palaciego hace tiempo.

Victoria merecida y muy importante, porque nos permite entrar de lleno en los puestos europeos y, de paso, tranquilizar a todo el mundo. Dos derrotas consecutivas ante dos rivales inferiores habría resultado difícil de digerir.

Por último, dos detalles de ayer que no quiero dejar pasar por alto y que no entenderé nunca:

– El abucheo a Fazio. No entenderé jamás cómo se puede silbar a un jugador de nuestra plantilla, y menos aún estando el partido en juego. Si alguien no puede remediar silbarle, pues que lo haga al final, pero con el balón rodando lo único que se conseguirá será poner nervioso al jugador.

– La actitud de los Biris. O más bien, de los supuestos Biris. Porque yo ya estoy empezando a creer que son béticos. Al menos, se están comportando como tales. Para ir al estadio a no animar y a gritar en contra del Presidente de su club… para eso mejor que no vayan.

Victoria con remontada, quintos en la tabla y a tres puntos del tercero. Eso es lo más importante.

El partido de los nombres

En el importantísimo partido que esta noche disputará el Sevilla con el Mallorca, donde nos jugamos el meternos en posiciones europeas o el seguir fuera de ellas, sobresalen muchos nombres. A saber:

– Andrés Palop. Hoy ha cumplido, nada más y nada menos que 39 años. Se ha recuperado a tiempo de su lesión en el dedo y, salvo sorpresa, será el guardameta titular.

– Diego Perotti. Parecía que no iba a llegar nunca el día, pero por fin ya vuelve el argentino a la lista de convocados. Si alcanza una buena forma física y va cogiendo el tono que dan los partidos,  puede ser un jugador importante; al menos en la faceta ofensiva, porque defender no es que defienda mucho.

– Federico Fazio. Míchel ha anunciado que será titular, es de suponer que sustituyendo a Alberto Botía. Esperemos que tenga uno de esos partidos buenos donde lo hace todo perfecto, sin ninguna desaplicación, como decía Cantattore. Han habido pocos, pero los ha habido.

– Joaquín Caparrós. Tan sevillista como ninguno, pero entrena al enemigo. Será bien recibido, como siempre.

– Giovani Dos Santos. El mejicano podría haber continuado lesionado una semanita más, pero no. Resulta que puede debutar hoy, ante una afición a la que le habría encantado que fichara por el Sevilla. Pero estará enfrente. Mal asunto. Probablemente no saldrá de inicio, a no ser que Caparrós venga con ideas muy ofensivas y se atreva a alinearlo junto a Hemed.

– Alejandro Alfaro y Pep Martín. Hijos pródigos que vuelven a su casa. Esperemos que se comporten y no agüen la fiesta.

– Tomer Hemed. El internacional israelí, ex Maccabi Haifa, es la principal baza ofensiva del Mallorca. Además, va muy bien por alto, y eso, unido a que jugará Fazio, lo convierte en un verdadero peligro.

Y por último, hay otros dos protagonistas, pero por ausencia:

– José Antonio Reyes. Ya no va ni convocado. El utrerano va de mal en peor. Curiosamente, si hay alguien capaz de hacerle entrar en vereda, ése es precisamente el entrenador visitante: su paisano Joaquín Caparrós. Le hizo debutar y, probablemente, sea quien mejor le conoce.

– Gary Medel. Es increíble lo de Gary, pero se va a llevar un mes sin jugar, por culpa del teatrero de Cesc Fábregas, del mal árbitro Mateu Lahoz  y de los diversos comités, a cual más incompetente, que se suponen deben impartir justicia en nuestra liga.

Partido con muchos protagonistas, de muchos nombres, pero partido que hay que ganar si queremos meter la cabeza en posiciones de Europa League. Porque, por ahora, dado el paso que están marcando algunos equipos, los puestos Champions parecen inaccesibles.

Reyes no cuenta para nada

Sorprendió ayer Míchel al no convocar siquiera a José Antonio Reyes. Todos sabemos que el utrerano está mal, pero lo que no sabíamos es que estuviera tan mal como para ni estar en el banquillo de suplentes, máxime cuando hay un hueco en la banda izquierda que rellenar y él era uno de los aspirantes al puesto.

Me da la impresión de que la decisión de Míchel va a traer consecuencias. O se carga a Reyes o lo recupera. Porque lo de ayer no puede considerarse ya un toque de atención, ni un «palito», sino que es un estocazo o estacazo, lo que se prefiera, en toda regla. Ahora todo depende de Reyes, pues Míchel no es que haya sido claro, sino que ha sido todo lo contundente que se puede ser.

Nuestro técnico se ha propuesto recuperar a Reyes, pues sabe que es un jugador que, por su calidad técnica, puede decantar partidos. El problema es que tiene tanta calidad como apatía, y hay que hacerle ver que tanto el club como la afición han apostado fuerte por él.

Aunque Reyes esté ya en el declive de su carrera, tras haber pasado por varios de los mejores equipos del mundo, aún puede ofrecer alguna que otra temporada a buen nivel. Ha cumplido hace poco 29 años y no ha tenido lesiones importantes. Aún no está acabado. De hecho, hay por ahí un buen puñado de jugadores que están compitiendo y ofreciendo un buen rendimiento con bastante más edad que el utrerano. Sin ir más lejos, en el sorprendente Levante tenemos varios ejemplos, o en el rival de esta noche, el Mallorca, que cuenta con el incombustible Pep Martí (37 años).

No hace mucho, Reyes decía en la televisión del club que estaba seguro de que la afición volvería a vibrar con él. Lo estamos deseando, pero parece que tendremos que esperar para verlo. Si es que lo vemos.

Copa asequible

Ayer tuvo lugar el sorteo de copa y nos deparó dos primeros enfrentamientos contra rivales teóricamente inferiores. En dieciséisavos nos enfrentaremos al Espanyol y en octavos, en caso de eliminar a los periquitos, al que resulte vencedor de la eliminatoria Deportivo-Mallorca.

La rama donde ha caído el Sevilla, a diferencia del año pasado, es realmente fácil, siempre hablando a priori, puesto que sólo nos encontraríamos como equipo fuerte al Atlético de Madrid, de manera que sólo tendríamos que medir fuerzas con el Madrid, Barcelona, Valencia o Málaga en una hipotética final.

Copa asequible, pero es evidente que no será nada fácil llegar a la final. Entre otras cosas porque si el Celta ha sido capaz de ganarnos, nos puede ganar cualquiera. Además, habrá que ver si tendremos suerte con las lesiones, sanciones, árbitros… en fin, los llamados «imponderables».

En cualquier caso, se presenta una buena oportunidad para plantarnos en la final. A ver si somos capaces de aprovecharla.

100 posibles fichajes en un año

Una de las cosas que más gustan a los aficionados son los fichajes, y eso lo saben perfectamente los medios de comunicación. Gusta y, por tanto, vende. Así, no es de extrañar que suenen constantemente nombres y más nombres como futuribles sevillistas.

Me he entretenido en recopilar, durante un año, los jugadores que han ido saliendo como aspirantes a formar parte del Sevilla y el medio de comunicación que publicó el nombre en primer lugar. Destaca sobremanera Estadio Deportivo. Son unos auténticos especialistas.

Muchos de los nombres de la lista, sin duda, habrán sido inventados; en otros casos, habrá habido un simple interés o no habrán llegado las negociaciones a buen puerto, y sólo una abrumadora minoría han acabado fichando por el Sevilla. De los noventa y ocho nombres que aparecen en ella, sólo han llegado finalmente seis jugadores:  Reyes, Javi Hervás, Botía, Kondogbia, Bryan Rabello y Cicinho. Otros, como Maduro o Diego López fueron «fichajes sorpresa», ya que ningún medio logró enterarse de las negociaciones hasta que no lo anunció el Sevilla.

Posiblemente, haya algún nombre que no esté recogido en el listado, pero creo que serán escasos.

Y, por supuesto, esto no acaba. Ayer mismo situaron en la órbita sevillista a Tony Jantschke, del Borussia Mönchengladbach. ¿Estará el alemán entre el 6% de jugadores que acaban fichando por el Sevilla? Tiempo al tiempo.

Del Bosque se hizo el hara-kiri

Ayer se le fue el partido a la selección, en el último suspiro, por varios motivos, pero quizás el más decisivo fuera la ilógica inclusión de Fernando Torres. No sé qué tendrá que hacer el ex del Atlético de Madrid para que Del Bosque se dé cuenta de que es un jugador que estorba más que aporta. Cuando juega Torres es como si jugáramos con diez, y eso es dar mucha ventaja a Francia, que también es muy buen conjunto y que también tiene jugadores de mucha calidad, como Benzema, Giroud, Ribery…

El nivel de la Selección es bastante alto, con algunos jugadores extraordinarios –Villa, Pedro, Iniesta, Silva…– pero con otros que son un peligro y que yo diría que incluso están claramente fuera de lugar, como Torres, Arbeloa o Juanfran. La absurda pérdida de balón de este último, cuando ya se había cumplido hasta el tiempo de prolongación, nos costó el partido. Aunque también es cierto que la defensa en general no estuvo muy acertada en esa jugada, ya que fue incapaz de cortar el contragolpe y, además, Ramos se despistó, perdiendo la posición con respecto a sus compañeros de defensa, con lo cual habilitó a Ribery para que asistiera a Giroud. Jugada desgraciada de principio a fin, desde que pierde el balón Cazorla en el córner hasta que marca Giroud. Y todo eso, en tiempo de descuento. Es casi inconcebible que, con los jugadores tan técnicos y experimentados que tiene España, sea incapaz de matar un partido a la italiana o a la argentina. Es decir, perdiendo tiempo vilmente y por cualquier medio.

Antes se pudo casi sentenciar el partido si Cesc Fábregas no hubiera fallado el clarísimo penalti que le hicieron a Pedro. Por cierto, tras las provocaciones a Kanouté y Medel, me cae tan mal el niñato teatrero que hasta me alegré de que fallara el penalti.

En cualquier caso, creo que el resultado fue justo, no sólo por el gol injustamente anulado a Francia, sino porque en la segunda parte los galos hicieron méritos suficientes como para empatar el partido.

Lo que hay que procurar para los próximos encuentros es no cometer errores tan graves, ni en el banquillo –sacar a Torres, dejar a Navas de espectador…– ni sobre el césped.

 

El sustituto de Trochowski

No está teniendo suerte Trochowski en el Sevilla. La temporada pasada no destacó e incluso perdió la titularidad, y en esta, cuando ya se había asentado en el equipo y había incluso marcado dos goles, le llega, de golpe y porrazo, una  grave lesión que le tendrá apartado de los terrenos de juego varios meses.

Dado que la economía del club no está para tirar cohetes, Del Nido ya ha avisado que no se fichará a nadie para sustituirle. Así pues, Míchel tendrá que buscar y rebuscar para encontrar el nuevo titular de la banda izquierda, siendo los máximos candidatos los siguientes:

– Diego Perotti. Todavía no está recuperado al cien por cien de su lesión. Es de suponer que, cuando lo esté, se hará con el puesto, pero, por ahora, habrá que esperar.

– José Antonio Reyes. Teóricamente, debería ser el utrerano el máximo beneficiado de la ausencia de Trochowski, pero lo cierto es que Reyes ahora mismo no está para nada. O se pone las pilas pronto o corre el riesgo de entrar en el ostracismo. Calidad le sobra, pero eso no es suficiente.

– Antonio Luna. Pienso que el de Pedrera ha cumplido, tanto cuando ha jugado de lateral como cuando lo ha hecho en el centro del campo. Es rápido, el que mejor defiende de los candidatos y se suele incorporar con frecuencia al ataque. No obstante, Míchel ha dado muestras de no confiar demasiado en él y preferir a Manu Del Moral.

– Manu del Moral. En mi opinión, el jiennense se pierde en esa zona. Defensivamente, debido a su poca garra, es prácticamente nulo. Y su juego ofensivo tampoco es que sea deslumbrante. No obstante, parece que es el jugador que más opciones tiene para hacerse con el puesto.

Y, por último, añadiría a Bryan Rabello. El chileno parece no contar para Míchel, ya que aún no ha sido convocado con la primera plantilla. Sin embargo, Rabello, aunque es diestro, ya ha jugado por la izquierda antes de venir al Sevilla. A pesar de fomar parte del filial, sigue contando para su selección. Es un jugador que desborda, rápido, con calidad y buen golpeo a balón parado. Es evidente que aún le falta mucho camino por recorrer, porque sólo tiene 18 años, pero creo que, si le dieran una oportunidad podría aprovecharla. Al menos, pienso que debería ir convocado.

Y luego están ya los experimentos: probar con Kondogbia, Campaña, Babá… Pero eso ya, con puntos es juego, quizás sea un riesgo demasiado elevado, como se pudo comprobar en Vigo.

Confío en que Míchel dé con la tecla, porque ahora mismo tenemos el equipo cojo, y eso, si se quiere aspirar a entrar competiciones europeas es un problema que conviene solucionar más pronto que tarde.

25 años como sevillista

Parece que fue ayer, pero hace ya 25 años que  me saqué mi primer carnet del Sevilla. Por tanto, hoy seré uno de los privilegiados a los que el club homenajeará en el día de hoy.

Yo no soy «sevillista de cuna», pues no tuve a nadie que me inculcara el sevillismo, ni me hablara de fútbol.  Sin embargo, desde bastante pequeño empecé a ver fútbol por la tele y empezó a llamarme la atención el Sevilla FC, y el Barcelona, ya que, por aquel entonces, los niños de mi edad, y sobre todo con los que me juntaba, sólo pensaban en jugar como Cruyff, que era el jugador estrella del momento.  Lo del Barcelona me duró poco y empecé a pensar ya como sevillista.

Por aquel entonces, en mi familia no se vivía el fútbol intensamente. Hoy día hay en ella una inmensa mayoría de simpatizantes sevillistas. Sólo tenemos una oveja negra, un tío político, que intentó hacernos, tanto a mí como a mi hermano –número de abonado inmediatamente inferior al mío–, béticos. Lógicamente, fracasó estrepitosamente. No sé si porque llegó tarde o porque yo siempre he sido muy listo :-). Yo entonces tendría unos siete años de edad, y a esas alturas ya se suelen tener las ideas bastante claras, al menos en lo que se refiere al fútbol.

Después empecé a escuchar los partidos por la radio, a José Antonio Sánchez Araujo, y, cuando podía, que era en raras ocasiones, por televisión. Hasta que un día decidí ir con un amigo al fútbol. Recuerdo perfectamente que el primer partido de fútbol que asistí en directo fue un Sevilla-Español, en el Ramón Sánchez Pizjuán, en la temporada 86-87. Se ganó por 1-0. Recuerdo que me llamó mucho la atención el ambiente y la gran diferencia que hay entre ver un partido de fútbol por la tele a verlo en el estadio. Estadio que, por cierto, me encantó.  Me pareció enorme, ya que yo hasta aquel día sólo había estado en el Benito Villamarín, por culpa de ese tío mío que me quería llevar por el mal camino cuando era pequeño.

Después fui a un segundo partido, creo recordar que contra el Sabadell, y ya me enganché. Hasta tal punto que, ya con 16 años, decidí abonarme la temporada siguiente, la 87-88, que fue cuando llegó Pablo Bengoechea, procedente del Wanderers uruguayo. También me hice adicto al Sevilla Atlético, nuestro magnífico filial, al que sigo siempre que tengo ocasión.

Tengo que admitir que durante estos 25 años se me ha pasado en alguna ocasión el mandarlo todo al garete. No ha sido por falta de sevillismo, sino por estar harto de tanta corrupción que hay en nuestro fútbol. Estoy hasta el gorro de tanto árbitro malintencionado, de tanto comité inútil, de tantos directivos federativos que buscan más el figurar que el bien del fútbol español, de tanto bombardeo mediático Madrid-Barcelona… Estoy harto de estar harto. ¿Pero cómo sería mi vida sin ir a ver al Sevilla? Sin duda, sería diferente. Ir a ver al Sevilla para mí es una ilusión. Cuando llego al estadio me olvido de todos los problemas y me concentro sólo en lo que ocurre sobre el terreno de juego. Es una pausa, un oasis, un portazo a las preocupaciones. Y si ya ganamos, pues miel sobre hojuelas.

Durante estos años he vivido momentos buenos y momentos malos como sevillista. Entre los buenos, los títulos y las clasificaciones europeas; entre los malos, los descensos y el fallecimiento de Antonio Puerta.

Veinticinco años visitando el templo del sevillismo. Y ahí seguiré, hasta que el cuerpo aguante.

Igualito que Mateu Lahoz. A ver si aprende.

Llama la atención una noticia publicada hoy en L’Equipe, más que nada porque es impensable que algo así ocurra en nuestra liga.

La noticia, titulada «El árbitro pide perdón», dice así:

«Bafetimbi Gomis estaba en posición de fuera de juego cuando el Lyon abrió el marcador el domingo, contra el Lorient (1-1), pero el trío arbitral, encabezado por Saïd Ennjimi, no lo había visto. Advertido de su error, el señor Ennjimi pidió ver a Loïc Fery, presidente del FC Lorient, para pedirle disculpas tras el partido. El mandatario agradeció el gesto, pero sin embargo, ha solicitado a la LFP que estudie la introducción del video en Francia. «Los árbitros son hombres y errar es humano. Aquellos que deseen recibir asistencia del vídeo deben ser escuchados», dijo en la página web de su club el martes».

Lo mejor y lo peor de este Sevilla

Aún queda mucha tela por cortar –de hecho, la liga no ha hecho más que empezar–, pero ya se atisban algunas características de este Sevilla que llevan al optimismo, y también otras que hacen que ese optimismo se quede ahí y no se convierta en euforia.

Vayamos, en primer lugar, a por lo bueno, que siempre es más agradable:

– Hay competencia en la portería. Palop está en un buen momento de forma, mejor incluso que en la pasada temporada. Aprovechó la sanción de Diego López, uno de los mejores fichajes, a priori, de este Sevilla, para arrebatarle el puesto. Es un seguro de vida tener dos porteros de nivel, porque es la posición más importante del equipo.

– La defensa es más sólida que el año pasado. Por un lado, Fernando Navarro está cumpliendo a buen nivel. Al mallorquín no se le pueden pedir virguerías técnicas ni que se lance al ataque, pero al menos cubre bien su lateral.

Por otro lado, la aportación de Cicinho se nota una barbaridad. Su banda ha dejado de ser un coladero y, además, se entiende muy bien con Navas. Entre los dos han convertido a la banda derecha como la principal baza ofensiva del equipo.

Y en el centro de la defensa están destacando el nuevo Spahic –parece otro– y Botía. El problema de Botía es que se carga con facilidad de tarjetas, algunas de ellas totalmente innecesarias.

– El centro del campo ha ganado en calidad con la incorporación de Maduro, que es el complemento ideal de Medel. El chileno sigue siendo el hombre clave a la hora de dar fortaleza defensiva al equipo, pero el Holandés le asiste con una gran seguridad y distribuye el balón con calidad.

En otras tareas, también está aportando mucho Trochowski, quien a pesar de que no le gusta jugar en la banda, lo está haciendo bastante bien. A Rakitic, pese a no ser aún el que encandiló al sevillismo a su llegada, también se le nota una mejoría en su juego y en su actitud.

En la recámara quedan dos jóvenes promesas, como son Campaña y Kondogbia, que aún tienen mucho que decir… y que mejorar. Habrá que verlos más minutos, pero no me convenció el partido que hicieron ante el Celta.

En lo negativo, sobresalen, de manera evidente, dos carencias: la delantera y la banda izquierda.

– El problema en la delantera se veía venir desde que no se le buscó sustituto a Luis Fabiano ni, más recientemente, a Kanouté. Míchel no parece contar, al menos en la práctica, con Babá, lo que conlleva que todo el peso ofensivo caiga sobre Negredo. Y ya sabemos que Negredo mete un gol pero falla tres. Y eso se traduce en muchos puntos perdidos a lo largo de la temporada. Si vamos a jugar sólo con un delantero, éste tiene que tener unas estadísticas mejores que las que está mostrando el vallecano. Yo lo veo así. Y Dios quiera que no se lesionen, porque, si no, sí que se puede ver un numerito a la hora de finalizar las jugadas.

– Todo lo bueno que tiene la banda derecha le falta a la banda izquierda. Perotti está lesionado, Reyes no está para nada, Luna no cuenta para Míchel –si así fuera, habría jugado en Vigo–, Del Moral no da la talla en esa posición –ni en casi ninguna, pero ésa es otra cuestión–… Así que la banda izquierda es para Trochowski, y si no está él, pues no es para nadie. Me habría gustado ver a Bryan Rabello en esa posición, donde ya ha jugado antes de venir al Sevilla, a pesar de ser diestro. El chileno es rápido y habilidoso, con lo que suele desbordar con facilidad. Además, tiene un buen golpeo a balón parado. Supongo que si no cuentan con él es porque aún lo ven muy verde.

Y para finalizar, Míchel. Es el máximo responsable en el aspecto técnico, para lo bueno y para lo malo. El madrileño se la juega esta temporada. Si fracasa no habrán excusas que valgan, pues se ha conformado la plantilla según su gusto y ha contado, a diferencia de la anterior, con una pretemporada. Hasta ahora, ha hecho cosas que me han gustado y otras que no me han gustado tanto. Por ejemplo, entre lo positivo, ha logrado que la plantilla muestre más agresividad y cohesión; y entre lo negativo, sin irnos muy lejos, no me pareció bien el experimento que hizo en Vigo. También creo que no está tratando correctamente a jugadores como Luna o Babá, que pienso merecen más minutos de los que están teniendo.

Lo que sí le deseo a Míchel es que tenga toda la suerte del mundo, porque al fin y al cabo, si a él le va bien, el Sevilla será el máximo beneficiado.

Primer tropezón serio

Nos ganó el Celta, y lo hizo sin hacer gran cosa, que, dicho sea de paso, es como nos suelen ganar los equipos, a priori, supuestamente inferiores.

Me dio la sensación de que Míchel estuvo algo despistado. Sorprendió sacando a los dos únicos delanteros que tenemos de salida, Negredo y Babá, pero no debió convencerle su apuesta porque a la media hora de juego ya puso a calentar a José Antonio Reyes, quien estuvo en su línea habitual. Vamos, que no aportó nada. Pero nada de nada.

Lo único que le hacía falta a Babá era eso: que una vez que lo ponen de titular, lo quitan a las primeras de cambio.

Eché de menos a Luna en el carril izquierdo. Creo que era una buena oportunidad para alinearlo, y más ahora, que está con el subidón de su reciente renovación. Pero a Míchel le dio por experimentar, y tuvo que hacer una corrección más tarde.

Se notó una barbaridad la ausencia de Medel. Se aprecia mejor lo que aporta el chileno al equipo cuando no está sobre el terreno de juego. El centro del campo dejó de ser una roca impenetrable, y lo acabamos pagando.

No me gustó Campaña. Creo que perdió una oportunidad para convencer a Míchel. Estuvo lento y fallón, muy impreciso en el pase, sobre todo en largo.

También vimos la mala versión de Negredo. Dispuso de tres ocasiones, y las falló todas. La primera, con el 0-0 en el marcador, a pase de Babá. La segunda, ya por detrás en el marcador, a pase de Manu Del Moral, y cruzó en demasía su disparo, con toda la portería para él; y la tercera, a pase de Navas, pero su cabezazo lo desvió el portero rival. Tuvo una cuarta, que también la falló, pero el linier anuló la jugada por fuera de juego inexistente.

No me gustó nada el partido que hizo el Sevilla. No se salió a por los tres puntos. Hay que ir a estos campos con mentalidad ganadora. Se dejó pasar el tiempo, con demasiado juego horizontal, lentitud e incluso algo de pasotismo, hasta que llegó el penalti y ya se complicó todo.

Por cierto, el penalti fue claro. Maduro no puede evitar el acto reflejo,  se tapa la cara, y le da en la mano. Penalty claro. A no ser que lo haga, por ejemplo, Sergio Ramos, que tiene licencia hasta para separar el brazo del cuerpo, y no pasará nada, porque será mano involuntaria.

No se nos pueden ir partidos contra equipos más que asequibles. Vale igual una victoria contra el Madrid que contra el Celta. Como eso no se le inculque a los jugadores lo vamos a pasar mal.

El próximo rival, el Mallorca de Caparrós. El equipo balear es un rival que se nos atraganta. Suele puntuar, juegue bien o mal. Un peligro al que haremos frente sin Medel ni sin Botía.

Hay que ganar como sea. Tres derrotas consecutivas no nos lo podemos permitir de ninguna de las maneras.

A mantener el nivel

El partido de hoy es clave, ya que todo lo que no sea ganar nos haría perder la plaza champions y, posiblemente, nos descolgaría de Atlético de Madrid y Málaga, que se enfrentan entre sí.

Será importante que Míchel sepa concienciar a los nuestros de lo que está en juego, y de que a partir de ahora no habrá rivales mediáticos durante un buen tiempo.

Espero que nuestros jugadores se hayan recuperado del mazazo de perder los tres puntos ante el Barcelona, más que nada por las formas. No recuerdo un mangazo tan descarado como el de Mateu Lahoz. Yo creo que se puede considerar de histórico.

Tres nombres propios para el partido de hoy: Gary Medel, Iago Aspas y Javi Varas.

Es increíble que a estas alturas todavía no se sepa si el chileno podrá ser de la partida. Bueno, pensándolo bien, en esta liga de mierda ya no hay nada que parezca increíble. Si ya era un disparate que el Comité de Competición le sancionara con dos partidos, no sé como llamar al hecho de que el Comité de Apelación haya ratificado esa absurda resolución. La única esperanza que queda es ya el Comité Español de Disciplina Deportiva. ¿Habrá alguien que arregle el desguisado o pagará Medel por unos platos que no ha roto?

Iago Aspas será el principal peligro con que se encontrará el Sevilla, a no ser que nos encontremos otro nefasto arbitraje. Aspas es el jugador celtiña más importante y fue decisivo para lograr el ascenso de su equipo, pues fue su máximo goleador, con 22 goles. Sonó para fichar por el Sevilla, pero finalmente renovó con el Celta hasta 2017.

Y, por supuesto, el tercer nombre es Javi Varas. No me gusta nada que nuestros jugadores –está cedido– puedan enfrentarse a nosotros. Esperemos que el bueno de Javi no tenga su día. Es fallón en las salidas por alto, pero tiene unos reflejos impresionantes.

Como anécdota, el Celta estrenará nuevos videomarcadores en el día de hoy. Confío en que nuestros jugadores se encarguen de amargarles el estreno.

El encargado de impartir justicia será Gil Manzano. A ver cómo se porta.