Archivo diario: 08/05/2011

Planteamiento absurdo y cobarde, resultado lógico: Sevilla 2 – R. Madrid 6

Apenas unos minutos me bastaron para darme cuenta de que el Sevilla iba a perder de manera escandalosa este partido.  No podía ser de otra manera, viendo el planteamiento inicial.

Yo no es que sea un gran entendido en esto del fútbol, pero soy un aficionado que lleva 35 años viendo fútbol, y eso me da para entender que si a Capel, que es zurdo, lo sitúa en la derecha, prácticamente se anula su banda. Si a Romaric, que es lento como él solo, lo sitúa en la izquierda, ocurre más o menos lo mismo con la banda izquierda. Una vez cortadas las alas, le añadimos que nuestro centro del campo lo conforman dos centrocampistas defensivos, con lo cual vamos a tener muchos problemas en la creación de juego.

Pero ahí no acaba todo, porque nuestra defensa, con centrales tan lentos como Fazio y Escude, y con tan buenos pasadores y jugadores tan rápidos  como tiene el Madrid, incomprensiblemente juega muy adelantada. Y lo que es peor, con un enorme desbarajuste, haciendo mal el fuera de juego y continuamente desarbolada por los desdobles de los jugadores del Madrid, que, prácticamente, llegaban en tromba en algunas ocasiones.

Con todo, el Madrid nos ha goleado porque le hemos dado muchísimas facilidades, tanto que algunos goles han sido casi regalados, por no decir todos. Algunos de nuestros defensores parecían que venían directamente de la Feria, con errores impropios de jugadores de Primera División.

Lo mejor del partido ha sido la afición, que hoy me ha impresionado, y la aportación de algunos jugadores, como Dabo, Medel, Kanouté, Negredo y Alfaro, en el poco tiempo que ha jugado. Lo peor, sin duda, las decisiones de Manzano y la defensa, hoy un auténtico coladero.

Yo creo que Manzano, después de este nuevo alarde de despropósitos, sobra en el Sevilla. Se ve que no tuvo bastante con lo de Getafe, y, de nuevo, no hizo ningún cambio en el descanso. Es de suponer que le gustaría lo que estaba viendo. A mí no me gustaba nada. Él sabrá. Menos mal que sólo le quedan tres partidos como entrenador.

El árbitro muy mal, como suele ser habitual. Pero eso, por lo que se ve, no tiene remedio.